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El Congreso de la Unión destinó más de 20 millones de pesos en reconocimientos, premios y condecoraciones a académicos, activistas y servidores públicos en recientes fechas.
Sólo en el premio al Mérito Cívico “Eduardo Neri”, el Congreso desembolsó 221 mil 451 pesos en diciembre de 2016, por lo que se posicionó como la compensación económica más onerosa que ha entregado a un ciudadano.
En los últimos seis años, senadores y diputados federales han abierto la convocatoria de más de 200 concursos, que van desde ensayos universitarios, encuestas hasta investigaciones de opinión pública.
Para el Grupo Parlamentario de Morena, y especialistas en el ramo, consideran un despilfarro de este recurso, toda vez que no se incentiva la investigación.
La propia Cámara de Senadores, al principio de la Legislatura se pronunció por eliminar este tipo de prácticas como lo son la entrega de dádivas y el clientelismo, que genera medios para cooptar la opinión pública y frenar la crítica.
Sin embargo, tanto San Lázaro como la propia cámara alta continúan derrochan recursos en actividades y artículos que no son necesarios para el quehacer legislativo.
Crónica de un derroche anunciado
A este gasto se le suma, otra serie de adquisiciones de cientos de miles de pesos que han hecho trabajadores, personal de comunicación social y los propios funcionarios de la cámara alta con cargo al erario.
Con base en su Informe sobre contrataciones correspondiente al cuarto trimestre del 2017, el Senado adquirió 45 relojes marca “Apple Watch Series 3” que en promedio tuvieron un costo de 8 mil 746 pesos cada pieza.
Mientras que otra de las compra que se reportaron, en este periodo de tiempo, se encuentra la adquisición de 241 abrigos de lana para la Dirección General de Resguardo Parlamentario, por los cuales se pagó un total de 277 mil 150 pesos.
Otros 712 mil pesos fueron gastados en diciembre de 2017 del presupuesto de la Cámara alta que tuvo como fin la compra de vales de despensa. Dicha adquisición fue ordenada por la Dirección de Recursos Materiales.
A la par, este tipo de gastos se suma otro cuyo monto fue superior a los 279 mil pesos, para la compra de mil ejemplares del libro “¿Qué es la democracia?” de Giovanni Sartori, adquiridos en noviembre del año pasado con la editorial Penguin Random House.
En tanto, durante el 2016, mediante adjudicación directa, la Dirección de Control Patrimonial contrató a la compañía Corporación de Papelera El Sótano SA de CV por la adquisición de bienes de consumo de cafetería por 232 mil pesos.
Así como para la Unidad de Atención a los Senadores se derrocharon 230 mil 608 pesos en la compra de 71 piezas de por concepto de “Obsequio protocolario con logotipo del Senado”. Cada presente le costó a la ciudadanía 3 mil 248 pesos.
En ese mismo año, pero en septiembre el Senado de la República a través de la Unidad de Eventos destinó 43 millones 153 mil pesos, a la empresa Grupo Zonura Prendes SA de CV por concepto de “Servicios de alimentos, meseros y personal de apoyo”.
El contrato con Grupo Zonura continúa vigente, pues la empresa realiza sus servicios desde septiembre de 2016 y el contrato vence el 31 de diciembre del 2018.
Dato:
250 mil pesos es el premio más oneroso que han entregado senadores y diputados federales
Ropa y artículos de marca
- Abrigos valuados es más de 40 mil pesos fueron adquiridos por personal de la cámara alta
- 45 relojes tasados en casi mil pesos desembolsaron el Congreso para el quehacer legislativo del personal de ambas cámaras
Promesa en el limbo
Al principio del año tanto la cámara de senadores como la de diputados se comprometieron a amarrarse el cinturón en materia económica y elabora un plan de austeridad debido a la depreciación del dólar frente al peso mexicano; sin embargo, la promesa quedó en el aire.
