Metro derrocha mil millones en escaleras que no funcionan

El sistema de Transporte Colectivo Metro (STC) desembolsó en el último sexenio 856 millones de pesos para la reparación, mantenimiento y remodelación del parque de escaleras eléctricas y elevadores en las 12 líneas; sin embargo, 40% de estos aparatos al menos una vez han estado fuera de servicio.

Publimetro obtuvo copias de los contratos que firmó la dependencia capitalina para construir, adaptar y mejorar ambos tipos de instalaciones desde 2013 a 2018, vía Ley General de Transparencia, pero hasta la fecha estos artefactos continúan con una serie de fallas.

Según detallan los documentos, las autoridades del STC obtuvieron varias bolsas económicas de la Federación y del Gobierno de la CDMX para subsanar las constantes deficiencias que presentan las escaleras electromecánicas, pero hasta la fecha no se sabe cómo se gastó ese recurso.

La situación hizo crisis debido a que en las últimas semanas se han presentado diferentes desperfectos en escaleras eléctricas, con las que incluso han resultado varias personas con heridas menores.

Uno de los casos más recientes se originó en una de las escaleras eléctricas del Metro Mixcoac, Línea 7, que provocó la caída de algunos usuarios y donde resultaron con lesiones al menos ocho personas, cinco hombres y tres mujeres. La falla fue muy similar a la registrada hace menos de un mes, pero en la estación Tacubaya, donde también colapsó una escalera eléctrica y dejó como saldo dos personas heridas.

Esta casa editorial realizó un recorrido por la Línea 7 del Metro donde se constató que al menos dos escaleras se encuentran fuera de servicio y esto ha ocasionado el enojo de usuarios. Las más afectadas son las personas con alguna discapacidad y los adultos mayores.

“El asunto es grave porque los que más sufren son las personas adultas mayores que vienen a trabajar a esta zona de forma diaria”, externó Alejandra Martínez, una usuaria del Metro.

La inconformidad es tal que varias personas han presentado quejas y denuncias en las oficinas del Metro y se han volcado en las redes sociales en contra de la administración que encabeza Florencia Serranía Soto.

Publimetro solicitó desde hace más de 10 días la postura de las autoridades del STC; sin embargo, el área de comunicación no dio respuesta hasta el cierre de esta edición.

Intercambian escaleras por voluntarios

Tras las fallas que se registraron en escaleras electromecánicas, el Sistema de Transporte Colectivo desplegó 50 trabajadores de la dependencia para brindar ayuda a quien lo necesite.

Este servicio se brindó en las estaciones San Pedro de los Pinos, Polanco, Auditorio, Constituyentes, Refinería, Tacubaya, Barranca del Muerto y San Joaquín, todas de la Línea 7.

La medida ha resultado insuficiente, pues los propios usuarios señalan que ha sido incómodo ser cargados por el personal del Metro, y en el caso de las sillas de ruedas es aún más complicado, debido a la altura de las escaleras.

Por si fuera poco, el Metro reveló que hallaron basura, botes de aceite usado y productos de desecho debajo de las escaleras eléctricas. Los motores son revisados tras los accidentes registrados en las estaciones Tacubaya y Mixcoac de la Línea 7 del Sistema de Transporte Colectivo.

“Como parte de la revisión y mantenimiento a los equipos se detectaron estas irregularidades, que hacen evidente la falta de mantenimiento preventivo adecuado, lo cual derivó en el mal funcionamiento de algunos elementos móviles”, indicó el gobierno capitalino.

«Es una amputación a la movilidad»

Víctor Alvarado, Coordinador de Movilidad para el Poder del Consumidor

¿Crees que la nueva administración se está quedando corta para resolver este problema?

— Esto es una amputación a la movilidad dentro de la Ciudad de México, hay que recordar que el Metro mueve a casi 5.5 millones de usuarios al día y que estas afectaciones, que parecerían mínimas, sí tienen un impacto en los tiempos de viaje.

Por otro lado, dentro de la capital contamos con una Ley de movilidad, es decir, se tienen que crear los mecanismos necesarios que garanticen una movilidad segura y accesible entre otros aspectos. Y cuando nos encontramos que este sistema, que mueve al grueso de la población, presenta o manifiesta daños y perjuicios a los ciudadanos, detona en una situación más grave. Sobre el millonario presupuesto que se destinó a estos rubros, ¿qué opinas?

— Más allá de este dinero, de un posible subejercicio, de la posible falta de recursos se tiene que generar una activación para garantizar, por lo menos, opere de forma habitual y que se retome el camino y paulatinamente mejore a corto y mediano plazo.

Primero que nada, tenemos que partir de la ejecución de una activación de forma emergente y se tiene que garantizar la movilidad de personas que usan sillas de ruedas o presentan otras discapacidades.

El problema de fallas y averías en toda la red es un problema añejo, ¿qué se debe hacer?

— La administración capitalina ha tratado de minimizar este problema que al fin a cabo termina siendo público y que atenta precisamente contra las políticas públicas.

De repente pareciera que existe esta omisión por parte del gobierno de la Ciudad de México, sobre todo porque esto le pega directamente a la gestión local por la vía jurídica, porque hay perjuicios a los mismos usuarios. Se debe acabar todo ese tipo de omisiones y empezar a poner fechas para brindar resultados.

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