Para la experta en comunicación e imagen política, el gobierno de la Ciudad de México no tuvo un adecuado control de daños sobre la manifestación que se suscitó el pasado 16 de agosto.
¿Cómo viste la marcha que se registró el 16 de agosto?
— Hay una crisis de violencia que hay en México hacía las mujeres, lamentable- mente la atención se centró en los vidrios rotos, en las pintas del Ángel de la Independencia, los destrozos al Metrobús, cuando esta protesta es una consecuencia del alto nivel de hartazgo de las mujeres por los asesinatos. Cifras oficiales revelan que nueve mujeres mueren al día en promedio, se le suma el acoso sexual y tipos de discriminación como la brecha salarial que padecen cientos de miles de mujeres que ha provocado este tipo de reacciones.
¿Cómo viste la postura del Gobierno de la Ciudad de México ante este panorama?
— No podemos tapar el sol con un dedo, el resultado fue una carencia de perspectiva de género por parte de los asesores de la administración capitalina, ya que en primera instancia se dio un mensaje sobre una presunta violación hacia titular de la policía. Debe existir la sensibilidad y la coherencia por parte de los funcionarios referente a la diamantina y el destrozo de algunas puertas; sin embargo, posteriormente en un intento de control de daños, la jefa de gobierno puso sobre la mesa las medidas que se están toman- do para combatir este tipo de violencia en su gestión.
¿El feminismo va en contra de los hombres?
— No es movimiento revanchista, es una absoluta mentira, el feminismo lo que reivindica es la igualdad de todas las personas sin distinción de género, pero hay que visibilizar que históricamente existe un género opresor y un oprimido. Por ello, buscamos corregir la brecha de género que está en todos los aspectos, todas las esferas en la sociedad que van desde la parte laboral, la parte económica cómo se distribuyen los labores de crianza hasta la violencia física y acoso en las calles. Este sistema donde vivimos resalta quien tiene derecho sobre las mujeres.
¿Falló la estrategia del gobierno de la ciudad?
—La diamantina dejó al descubierto la falta de pers- pectiva de género entre la función pública, lo que ne- cesitamos es que el discur- so escale a todos los niveles del gobierno. Se necesita reubicar la propia jefa de gobierno y evitar la falta de comunicación, revictimizar en los ministerios públicos, así como elaborar protoco- los de sensibilización entre todos los servidores públi- cos. Lo que ha permitido que la ola de asesinatos en contra de las mujeres siga es la impunidad; es decir, no se sanciona, no se castiga al responsable. A tal grado que existe reincidencia debido a la impunidad que existe.
Respecto al desempeño de la policías, ¿qué opinas?
— Debe existir una purga, porque estos casos que detonaron la manifestación fue- ron por parte de elementos de seguridad pública, fue el punto de partida de ahí el hashtag #NoMeCuidanMeViolan. Esto respecto al cuerpo de seguridad, pero también el objetivo debe ser darle un voto de confianza el gobierno y estar vigilantes a que esto no se visualice esto como una crisis política con una de relaciones públicas.
Lanzar diamantina a Jesús Orta se convirtió en consiga de la marcha anterior ¿Qué otros métodos utilizan para protestar como éste?
— Habría que analizar por qué fue necesario llegar a este tipo de manifestaciones y a ese nivel para que la gente empezara a con- versar más firme y sostenida sobre esta problemática, crisis que lleva muchos atrás. Con este auge de la Cuarta Ola Violeta o del feminismo está más en agenda de los medios de comunicación, entonces es invitar a la reflexión en todos los sectores, porque me encantaría que a las mujeres las atacaran sólo con diamantina rosa. Hay que tener mucho cuida- do en no centrarnos en la rama y ver por completo el árbol.
Un dato:
9 mujeres son asesinadas cada día en México de acuerdo con la ONU.
