Creyó que su abuso quedaría impune, pero no, la justicia de Brasil detuvo al jugador de voleibol, Earvin N’Gapeth, quien agredió sexualmente a una chica en el interior de una discoteca.
El deportista francés, que defiende la camiseta del equipo ruso Zenit Kazan, se encontraba reunido en un bar de la ciudad de Belo Horizonte, capital del estado Minas Gerais, cuando tocó el trasero de una joven que ingresó al lugar acompañada por varios hombres.
La mujer agredida acudió a la policía a denunciar el abuso del atleta, a quien acusó de haberla tocado sin su consentimiento, pues desconocía quién era.
Libertad bajo fianza para Earvin N’Gapeth
Aunque fue arrestado por la policía la madrugada del lunes 09, la juez Fabiana Cardoso Gomes, decidió conceder la libertad al jugador Earvin N’Gapeth, bajo la condición del pago de una fianza que ascendió a 50 mil reales, equivalentes a 12 mil dólares, y además también dictó prohibición de acercamiento a la víctima, según información publicada en el portal El Salvador.
https://twitter.com/_Math29/status/1204394907647037440
En un video del local, que posteriormente fue difundido en las redes sociales, se ve al jugador de 28 años, cuando da un manotazo al trasero de la chica, en el momento en que esta va pasando por el grupo que acompañaba a N’Gapeth.
Posteriormente, el abogado del deportista ofreció declaraciones en la que defendía a N’Gapeth, quien se encontraba en Brasil participando en el Mundial de Clubes de Voleibol, celebrado del 3 al 8 enhttps://www.instagram.com/p/B5sSeQhIVs7/ Belo Horizonte.
“La broma” de Earvin N’Gapeth
Tras ser dictada la medida de libertad bajo fianza, el abogado del deportista alegó que su defendido «confundió» a la chica con una de sus amigas más próximas y le dio un toque a su trasero en un tono de “broma”, gesto que es común al que utilizan los jugadores de esta disciplina entre sí cuando se encuentran en plena cancha, según reseña el portal Olé.
Después de dos días de cárcel, Earvin N’Gapeth, reconoció el abuso cometido contra la chica y se justificó diciendo que todo se trató de un “malentendido”.