Una red de pornografía infantil que operaba en al menos 12 países sufrió un golpe certero. Su brazo peruano fue desmantelado por efectivos de la Policía Nacional del Perú (PNP) en un operativo simultáneo en Lima y siete provincias. Dieciséis personas resultaron detenidas.
La investigación de la red determinó que «hay conexiones en al menos 12 países, incluyendo México, Centroamérica y Europa«, informaron funcionarios policiales.
El reporte de Radio Programas del Perú (RPP) agregó que las detenciones se produjeron de forma simultánea en «Cusco, Piura, La Libertad, Tacna, Amazonas, Cajamarca y Lima», dijo.
#PNPInforma📢 | En un megaoperativo, efectivos policiales de la #Dirincri, intervinieron a 16 personas que integraban el grupo “Extreme Children Porn Perú”, quienes a través del WhatsApp distribuían imágenes de abuso sexual de menores de edad. #PolicíasEnAcción🚨 pic.twitter.com/Ub4pjQaJBH
— Policía Nacional del Perú (@PoliciaPeru) February 14, 2020
Red de pornografía infantil compartía material por WhatsApp
La red operaba bajo la modalidad de grupo de WhatsApp. En el chat compartían, diariamente, imágenes de abusos sexuales a niños. El grupo se llamaba «Extreme Children Porn Perú«. Sus miembros, además, formaban parte de otros grupos en la misma plataforma.
El jefe de la División de Alta Tecnología (Dinviat) de la PNP, Orlando Mendieta, informó al diario Perú 21:
«Esta red era conformada por más de 200 personas que a la semana intercambiaban fotos y videos de abuso sexual a menores de edad. Para permanecer en el grupo tenían que compartir material propio».
Otras 24 personas están siendo buscadas por funcionarios policiales en todo el Perú. La policía sigue la pista de una alerta que se dio en Costa Rica, a través de Interpol, en 2018, cuando se determinó que un grupo similar operaba administrado por un guatemalteco. En él, también participaban peruanos.
Un funcionario de prisiones implicado
Una de las capturas por la red de pornografía se realizó a la salida del centro penitenciario Piedras Gordas, en el distrito de Ancón, al norte de Lima. Se trata de un funcionario del Instituto Nacional Penitenciario (Inpe).
RPP agregó que «durante el allanamiento a las viviendas, los detectives incautaron evidencia digital del delito de pedofilia, como fotografías y videos de abusos sexuales almacenados en varios dispositivos».
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