Los profesionales de la medicina en China también han sucumbido a los estragos del coronavirus. En tan solo un mes, a cuatro asciende el número de médicos fallecidos a causa de esta temible enfermedad en el hospital de Wuhan, donde trabajaba el profesional de la medicina que alertó del virus a inicios de enero.
En el día de hoy, murió el doctor Zhu Heping, especialista en enfermedades oculares, lo que lo convierte en el cuarto galeno que es víctima del coronavirus, mientras cumplía su deber de atender a los pacientes contagiados.
Según reportes oficiales, no había informado estar enfermo, por lo que mantuvo en silencio su padecimiento hasta que murió hoy en la Unidad de Cuidados Intensivos del hospital de la provincia de Wuhan, como refiere Daily Mail.
Ante la crisis del mortal coronavirus, el Dr. Zhu regresó a sus labores, al ser recontratado, ya que sus funciones habían culminado formalmente.
El primero en morir fue el doctor Li Wenliang, el pasado 7 de febrero, provocando la ira de muchos ciudadanos chinos que reclamaron a las autoridades de ese país de ser el culpable de reprimir a este profesional de la oftalmología, quien descubrió este virus y quiso alertar de sus fatales consecuencias.
Los otros médicos son el doctor Jiang Xueqing, de 56 años, quien falleció el 1 de marzo y laboraba para el hospital Central de Wuhan, como especialista en enfermedades de glándula mamaria y la tiroides.
Seguidamente, el 3 de marzo se reportó la muerte de Mei Zhongming, de 57 años, en el hospital Jinyintan de Wuhan.
Los médicos héroes que batallan contra el coronavirus
Los colegas de este médico, han elogiado la labor del Dr. Zhu al calificarlo como “trabajador y dedicado”.
Pese a estar enfermo, continúo cumpliendo sus labores debido a que sus síntomas se mostraron de forma intermitente. Pero una vez que su condición comenzó a empeorar, reveló a un colega su estado.
Los doctores Zhu y Mei laboraban en el mismo hospital que el Dr. Li, quien después de batallar contra la enfermedad, encontró la muerte convirtiéndose en especie de héroe para la población, al ser el primer médico que con responsabilidad quiso sonar las alarmas de este brote que ya está presente en 100 países del mundo.
