MADRID, 15 (EUROPA PRESS)
El Gobierno de India ha acusado este martes a China de no respetar los acuerdos fronterizos tras los últimos incidentes en una región en disputa y ha recalcado que las autoridades «están preparadas para hacer frente a todas las contingencias».
El ministro de Defensa de India, Rajnath Singh, ha dicho que Nueva Delhi «es muy serio sobre los asuntos de soberanía» y ha advertido a Pekín contra cualquier nueva violación de territorio indio, según ha recogido la cadena de televisión NDTV.
Singh ha destacado la disposición de India a resolver el asunto por la vía del diálogo y ha incidido en que el Gobierno del país «quiere que China trabaje» con Nueva Delhi en este sentido. Sin embargo, ha hecho hincapié en que «no debe haber duda sobre la determinación para proteger la soberanía e integridad territorial de India».
«Seguimos comprometidos con una resolución pacífica a la situación actual. Al mismo tiempo, el Parlamento puede tener seguro que seguimos preparados para hacer frente a todas las contingencias», ha zanjado, en una comparecencia ante el organismo legislativo.
Los ministros de Exteriores de India y China, Subrahmanyam Jaishankar y Wang Yi, respectivamente, mantuvieron el 10 de septiembre en Moscú su primera reunión desde los mortales enfrentamientos en mayo en una zona de la frontera en disputa en la cordillera del Himalaya.
Las relaciones entre los dos gigantes asiáticos se han deteriorado desde el pasado mes de mayo en medio de la creciente disputa por la región de Ladaj y la semana pasada ambos países intercambiaron nuevas acusaciones en torno a otro incidente en esta zona.
Ladaj fue escenario de un enfrentamiento entre soldados indios y chinos, sin emplear armamento, que se saldó con 20 militares indios muertos el pasado mes de junio. Se trató de la peor confrontación entre los dos vecinos en 45 años.
India y China se enfrentaron en una breve guerra por su frontera en 1962. India disputa el control de China sobre 38.000 kilómetros cuadrados de tierra en Aksai Chin, que sostiene que formas parte de Ladaj. Pekín reivindica a su vez 90.000 kilómetros cuadrados de territorio en Arunachal Pradesh, que considera parte del sur de Tíbet.
