La Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad de México (CDHCM) emitió una recomendación a la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México (FGJCDMX) por «la falta de debida diligencia en la búsqueda de personas desaparecidas con perspectiva de género y enfoque diferenciado».
La Recomendación 02/2020 es sobre nueve casos de búsqueda de personas. La presidenta del Organismo, Nashieli Ramírez Hernández, destacó que los nueve casos que integran dicho instrumento se hacen públicos para volverlos visibles, hablar de las ausencias y las esperanzas de las familias que los buscan.
“Esta Recomendación no es final de ese proceso sino el inicio de uno nuevo en que la confianza de las víctimas en las autoridades se construye y reconstruye todos los días, a partir de las mismas acciones que pudieron romper esa confianza en primer lugar”, enfatizó.
Autoridades ‘cometieron graves fallas’
Explicó que este acto pone en el centro de nuestra memoria, y del empeño de las instituciones de esta Ciudad, a Guadalupe Pamela Gallardo Volante, Mariela Vanessa Díaz Valverde, Belem Hernández Cruz, Miriam Nohelly Márquez Ramírez, a dos adolescentes, un niño y dos mujeres.
Sus vidas, apuntó, eran vividas en lo ordinario y desaparecieron al realizar las actividades cotidianas: ir a la escuela, compartir con amistades, buscar nuevos escenarios para crecer, trabajar, disfrutar el espacio público en bicicleta y luchar por sobrevivir en las calles de la Ciudad.
«Las autoridades encargadas de indagar sus paraderos, cometieron graves fallas en el cumplimiento de las obligaciones de realizar una investigación seria, imparcial y efectiva para dar con ellas; así como de la de proteger el derecho a la vida e integridad mediante una búsqueda inmediata», precisó.
Entre los puntos de la Recomendación 02/2020 esta CDHCM solicita llevar a cabo las acciones para concretar la inscripción de las víctimas directas e indirectas en el Registro de Víctimas de la Ciudad de México, así como generar los planes de reparación integral del daño para cada una, y ejecutar cada una de las medidas derivadas.
También diseñar e implementar los mecanismos de acompañamiento psico-jurídico, que considere las características de cada víctima, de la mano con ellas.