La víctima se constituye como parte civil y podrá reclamar indemnizaciones
ROMA, 27 (EUROPA PRESS)
El seminario para jóvenes aspirantes a sacerdotes ‘San Pío X’, localizado en los jardines del Vaticano, cerca de la casa Santa Marta donde reside el Papa, en el que supuestamente tuvieron lugar los abusos sexuales a un menor por parte de otro compañero entre 2007 y 2012, será citado a juicio en el primer caso abierto de este tipo en el tribunal del Vaticano.
La citación en el juicio del seminario en calidad de ente jurídica estará representada por el sacerdote, Angelo Magistrelli, actual rector del mismo.
En la sesión oral que ha tenido lugar este martes 27 de octubre en la que estaban presentes los dos acusados Gabriele Martinelli, de 28 años, que era seminarista cuando se produjeron los presuntos hechos y que se ordenó sacerdote en la diócesis de Como (norte de Italia) en 2017; y Enrico Radice de 71 años, que ejercía de rector de ese centro, la víctima se ha constituido como parte civil. Esta acción le habilita a reclamar una indemnización en caso de sentencia condenatoria en concepto de daños y perjuicios.
Además, el representante legal de la víctima ha pedido tener acceso a todo el sumario judicial del caso, algo factible por la ley que acabó con el secreto pontificio aprobada por Francisco en diciembre de 2019. Hasta esa fecha, las víctimas de casos de abusos sexuales que hubieran presentado denuncia ante la justicia eclesiástica no tenían derecho a saber si se había admitido a trámite la misma o si había sido abierto un juicio. Las sesiones del juicio se retomarán el próximo 19 de noviembre.
A los dos procesados se les imputan delitos distintos: Martinelli ha sido procesado por haber cometido supuestos abusos sexuales contra otros compañeros seminaristas menores que él, mientras que a Radice se le acusa de no haber denunciado la acusación y hasta haber obstaculizado las investigaciones de los hechos.
El centro de formación donde supuestamente sucedieron los hechos funciona como alojamiento para jóvenes que suelen ayudar en las misas de los sacerdotes del Vaticano y en ocasiones también en las celebradas por el Papa, por lo que son conocidos como los monaguillos del Santo Padre.
La justicia del Vaticano abrió diligencias en 2017 después de la publicación del libro ‘Pecado original’ del periodista italiano Gianluigi Nuzzi, en el que se denunciaban los abusos cometidos en ese seminario entre 2011 y 2012. Tanto este periodista italiano como Emiliano Fitipaldi fueron absueltos del delito de filtración de documentación reservada de la Santa Sede en un juicio en el que el Tribunal Vaticano constató su falta de competencia jurídica para procesarlos.
En el libro ‘Pecado original’, Nuzzi reprodujo las denuncias del joven polaco Kamil Tadeusz Jarzembowski sobre lo que ocurrió en este seminario y reveló «abusos en su habitación a otro seminarista» que se produjeron «más de 140 veces» por parte de un pupilo del rector «que era mayor que él y que después se convirtió en sacerdote», en relación al sacerdote Martinelli.
