MADRID, 4 (EUROPA PRESS)
El Gobierno de Hungría ha anunciado el próximo cierre de comercios y servicios no esenciales y la suspensión de las clases en centros infantiles y de primaria para contener la tercera ola de contagios, que ha provocado que haya ya más de 100.000 casos activos de COVID-19 en territorio húngaro.
Las autoridades sanitarias han notificado este jueves 6.278 nuevos casos, una cifra sin precedentes desde la primera semana de noviembre y que eleva a 446.178 los positivos en Hungría desde el inicio de la pandemia. Al menos 15.476 enfermos han fallecido, 152 más que el miércoles, según los datos oficiales.
El jefe de gabinete del primer ministro, Gergely Gulyas, ha confirmado que, ante la evolución de los datos, el Ejecutivo considera necesario que las tiendas y servicio que no sean considerados esenciales deben suspender su actividad entre el 8 y el 22 de marzo. Las clases para los alumnos más pequeños también cesarán el próximo lunes, con vistas a que no se reanuden al menos hasta el 7 de abril.
El Gobierno ha exhortado a las empresas a fomentar el teletrabajo y ha explicado que el deporte en interiores solo estará permitido a deportistas federados, mientras que seguirán vigentes otras medidas como el uso obligatorio de mascarillas, el cierre de restaurantes o los controles en frontera, informa ‘The Hungary Today’.
«Las cifras son claras», ha sentenciado Gulyas, al advertir de los riesgos de un tercera ola que teme peores a las dos anteriores. No obstante, el Gobierno ha defendido que al menos en la campaña de vacunación Hungría va por delante que sus socios de la UE, principalmente por la compra de las vacunas rusa y china.
