La cara del sector en donde estaba el Penal del Topo Chico se renovó y ahora es totalmente diferente con la existencia del Parque Libertad.
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A casi dos años del cierre del mítico centro penitenciario, el gobernador de Nuevo León, Jaime Rodríguez Calderón, inauguró el nuevo espacio.
El Parque Libertad se construyó en el sitio que alguna vez fue escenario de cruentos enfrentamientos entre miembros del crimen organizado.
También se vivieron tantas historias de terror, dolor y muerte.
El Bronco destacó que es el único gobernador, en los últimos 9 sexenios, que se decidió a cerrar y reubicar este lugar.
“Imagínense quitarle el negocio de 500 millones de pesos mensuales a la delincuencia que controlaba el Penal del Topo Chico, no es sencillo; no es fácil”, sentenció.
La obra tuvo un costo de 152 millones de pesos en su primera etapa y se edificó en las 10 hectáreas de terreno en donde estaba el extinto Penal, inaugurado en 1943.
Consta de 6 mil metros cuadrados de explanadas, 4 mil metros cuadrados de andadores peatonales, circuitos de vita pista, una ciclo pista de 900 metros, área central con cancha de futbol, entre otras cosas.
Al centro se conservó el edificio de las celdas denominado “la cruz” , en donde se contempla albergar un museo de la historia del Penal.
