Pisar los terrenos del despecho, hablando de las relaciones de pareja, es peor que enfrentarse a arenas movedizas o incluso un campo minado. Porque cuando se trata de dar por terminada una relación en la que una de las dos partes se aferra a que ésta no termine, todo puede convertirse en un verdadero infierno que podría terminar en una tragedia digna de la “nota roja” de la más escandalosa publicación que ustedes puedan imaginar.
Cierto, el despecho (sentimiento que deriva de la desesperación) puede presentarse tanto en hombres como en mujeres, pero cuando se trata de los primeros, éste se manifiesta en acciones que regularmente son de índole depresiva, mientras que cuando se trata de las segundas, ¡cuidado!, se hace patente en situaciones verdaderamente vengativas y destructivas.
Así que, al momento de iniciar una relación con una persona, ya sea un noviazgo, un affaire o incluso una extramatrimonial, hay que tener muchísimo cuidado, porque en cualquier lado y bajo cualquier circunstancia podríamos estarle abriendo las puertas de nuestra vida a un psicópata en potencia.
¿Cómo darnos cuenta de si estamos frente a un individuo que en una situación de ruptura podría desarrollar su despecho a grado tal de lastimarnos en cualquiera de las aristas que componen nuestra vida (el trabajo, la escuela, la familia, el círculo social e, incluso, nuestra integridad física)?
Definitivamente es muy difícil diagnosticarlo con atingencia, pero de mucho sirve saber si estamos interesados en alguien que manifiesta en su perfil psicosocial comportamientos obsesivos, depresivos o esquizoides.
Aquéll@s que con frecuencia nos están llamando por teléfono para saber dónde estamos y/o qué estamos haciendo; l@s que constantemente se aparecen por nuestro trabajo, nuestra escuela o nuestra casa sin avisarnos… cualquiera que dentro de su comportamiento nos hace sentir algún grado de acoso es definitivo que es alguien que potencialmente podría hacernos la vida de cuadritos en un entorno de despecho.
Y estas situaciones no hay que tomarlas a la ligera ni postergarlas en su resolución, porque si nos dejamos atrapar por la indiferencia, podemos llegar a episodios de verdad lamentables no sólo para nosotros mismos, sino para muchas personas que nos rodean.
Un individuo despechado (hombre o mujer) es capaz de cometer las peores atrocidades imaginables como son secuestros o asesinatos. No creo que ninguno de ustedes, querid@s amig@s, quisiera pasar por algo semejante.
Si están involucrados en una relación donde tengan la más mínima sospecha de que la otra persona está desequilibrada mental o emocionalmente, ¡huyan de inmediato!
Sugiéranle de forma sutil que requiere ayuda profesional y ustedes tomen todas las providencias necesarias para disipar cualquier duda de amenaza sobre sus vidas. Y no exagero. Insisto, muchas tragedias amorosas tienen como protagonista a un hombre o a una mujer despechada. ¡Cuídense mucho!
Y no olviden que todos los sábados los espero, en punto de las 23:00 horas, en su programa Exclusivo para hombres, que se transmite por Telefórmula (121 de Cablevisión y 121 de Sky).
Contexto
Cuando concluye una relación amorosa se produce un dolor profundo en los sentimientos y emociones. Es comparable a cuando fallece un ser querido porque, de una u otra manera, es una privación de lo que se suponía era parte de uno. La persona que no deseaba terminar la relación pasará por una experiencia dura, amarga y penosa que la puede llevar a la desesperación, una alteración extrema del ánimo causada por la rabia, la frustración y el resentimiento. Es primordial volver a la normalidad pronto y compartir con la gente. Cuesta lograrlo, pero aislándonos nos concentraremos en un pensamiento único de la relación fracasada. En la etapa de rabia es vital no dejarse dominar por odios y deseos de venganza, es preferible frecuentar a los seres queridos, como la familia y los amigos.
Fuente: www.psicologiaparatodos.com
Los terribles extremos del despecho
El 12 de junio de 1994, Nicole Brown y Ronald Goldman fueron brutalmente asesinados a las afueras de una propiedad de Brown, quien en ese momento era identificada como la exesposa de O.J. Simpson, célebre exjugador de futbol americano profesional y quien al momento de ese crimen ya era un actor que ocasionalmente obtenía roles secundarios en producciones de Hollywood.
Después de la detención de Simpson, señalado por las evidencias como el responsable de las muertes de su exesposa y el amigo de ésta, tuvo lugar uno de los juicios más publicitados en la historia de los Estados Unidos. Sin embargo, el 3 de octubre de 1995 fue declarado culpable… pero dos años más tarde fue llevado a la Corte nuevamente por el mismo caso, donde se le encontró responsable de ambas muertes. Inexplicablemente se encuentra libre en estos momentos.
Consultorio (NO) sexual
Cometí el grandísimo error de serle infiel a mi esposa con una mujer totalmente desquiciada. Al dejarla me provocó una serie de escándalos que me causaron que me divorciara, que perdiera mi trabajo y hasta que me mudara a otra ciudad a vivir… donde ya me encontró. ¿Es posible denunciarla a la policía?
Roberto Bartún, ciudad Mante, Tamaulipas
Respuesta: bueno, además de evidenciar ciertos desequilibrios mentales, lo que hace esta mujer es acoso. Acude a las autoridades encargadas de impartir justicia en donde estás viviendo actualmente y denúnciala. Seguramente obtendrás ayuda.
¿Qué escuchar?
Canción suave (Despecho N. 2) Caramelos de cianuro, 1996
En su segundo álbum, titulado Harakiri city, esta sensacional banda venezolana incluye un tema en el que el despecho es el protagonista principal.
¿Qué leer?
Por despecho 1999
Considerada “novelista del corazón”, la australiana Miranda Lee ha publicado aproximadamente 75 novelas rosas, entre otras Por despecho, que narra las peripecias de Olivia, una mujer que al ser abandonada por su novio se decide a arrasar con el mundo.
¿Qué ver?
Todo sobre mi madre 1999
Definitivamente se trata de una de las joyas del español Pedro Almodóvar, con una Cecilia Roth magistral encabezando una trama en la que varios sentimientos humanos se entrelazan a través de confusiones que derivan, entre otras cosas, en mucho despecho.
Vía Facebook
• María Araceli Torres. “Lamentablemente yo viví muy de cerca una historia en la que una mujer despechada (examante de mi primo) llegó al extremo de degollar a mi prima”.
• Manuel Santiago Martínez. “Actúan en contra de todo. Se cargan un odio tremendo, además de que recaen en muchos daños psicológicos de los que fueron víctimas”.
• Lily Rodríguez. “La exmujer de mi esposo me mandó a la policía acusándome de secuestrar a sus hijos y el SWAT llegó a mi casa para arrestarme. La verdad es que los niños no querían estar con ella”.
• Pily Moreno. “El despecho no es exclusivo nada más de las mujeres, hay hombres que al ser rechazados pasan de la patanería al acoso y eso es muy grave en una sociedad machista como la nuestra, donde el que manda es el hombre”.
Opinión
Yazmín Alessandrini
yazminalessandrini
@yahoo.com.mx
@yalessandrini1v