Compra y coacción de votos, malversación de fondos y condicionamiento de programas sociales son las tres principales quejas que acumula la Fiscalía Especializada para la Atención de Delitos Electorales ( FEPADE) en el actual proceso electoral. Datos oficiales nos dicen que de octubre (cuando comenzó a correr formalmente el proceso) a finales de abril se habían presentado más de 645 quejas ante la Fepade.
Lo anterior no significa otra cosa que el anuncio de la guerra poselectoral que habrán de enfrentar los partidos políticos y coaliciones electorales después del 5 de junio.
Pero también es una muestra de cómo opera el PRI en aquellas entidades donde ve inminentes riesgos de perder la elección, deja entrever la estrategia usada, año con año, en las elecciones por gubernaturas, diputados locales y presidencias municipales: compra, defrauda y amenaza.
Y si aún con estas artimañas las campañas de sus candidatos no levantan, utilizan lo que mejor saben hacer, lo que han hecho en casi un siglo, lo que los mantiene en el poder en por lo menos cinco entidades cuyas gubernaturas este año están en juego y que no conocen la alternancia: guerra sucia, espionaje y sabotaje.
Y como muestra un botón:
En Sinaloa, tal parece que el candidato del PRI a la gubernatura, Quirino Ordaz necesita del apoyo, mucho más económico, de los alcaldes del tricolor. En unos audio a, difundidos en redes sociales, se escucha al candidato hablar con un presidente municipal (en cual Acción Nacional ya levanto la Denuncia ante FEPADE) sobre la estrategia para la entrega de recursos económicos para garantizar el reparto de dinero para comprar el voto y «amarrar» la elección.
En Tamaulipas, pareciera que todos juegan a «pégale a Francisco Javier García Cabeza de Vaca», pues además del PRI, otros actores se han sumado al golpeteo mediático contra quien encabeza las preferencias electorales. Esto provocó incluso que el independiente Francisco Chavira González acordará con el panista Cabeza de Vaca armar un frente común, para que el que tenga mayor apoyo decline a favor del otro. En Tamaulipas ya ganó el PAN.
En Chihuahua, el presidente estatal del PAN, José Luévano, advirtió en días pasados que de manera tramposa el gobierno federal y el gobierno del estado, utilizando recursos del Fondo Nacional de Desastres (Fonden), iniciaron la entrega de despensas y artículos de construcción a pobladores de los municipios de Valle de Allende, Guachochi, Coyame y Parral, entre otros.
El 3 de mayo, el presidente nacional del PAN, Ricardo Anaya, denunció una operación electoral en Veracruz a favor del PRI, a través del programa gubernamental Prospera. Anaya presentó audios en los que se escucha al delegado de Prospera en Veracruz, Alejandro Baquedano, hablando con el diputado local priista Raúl Zarrabal. El funcionario federal compromete el apoyo de 3 mil familias para el tricolor.
Las historias de guerra sucia del PRI suceden en todas las entidades en donde habrá elecciones. En Hidalgo que no sea extraño que el día de las elecciones la Policia estatal lleve a cabo operativos con detenciones espectaculares, acusando a presuntos delincuentes electorales cuando en realidad de lo que se trata es de disminuir fuerza de la oposición.
Ese ha sido siempre el actuar del tricolor y ese es el modus operandi de una pandilla electoral con experiencia en ganar elecciones a la mala. Por eso, que no sea extraño tampoco que mucho del actual proceso electoral, que se tendría que definir originalmente el domingo 5 de junio, se resuelva en los tribunales electorales. Esa es la historia sin fin del PRI, esa es la historia interminable?. De nuestro México. Ayer murió Don Luis H. Álvarez, Gran Panista, Gran Demócrata, Gran Defensor de los Derechos Humanos. mis condolencias para su familia.
