Enrique Ochoa, dirigente nacional del PRI, debió soltar ayer la convocatoria para el registro de precandidatos a la postulación presidencial. De inmediato el documento despertó suspicacias pues se imponen duros requisitos a los militantes del institucional, pero se suavizan si se trata de simpatizantes. La definición, como usted ya adivinó, tiene nombre y apellido.
Edison Lanza y David Kayne, relatores de Libertad de Expresión de la OEA y la ONU, respectivamente, iniciarán este fin de semana una misión conjunta a México, lo que da cuenta de la preocupación internacional sbre el deterioro de este campo en el país, incluyendo ataques contra periodistas y medios, presiones comerciales por parte de autoridades federales y estatales y malas condiciones laborales para ejercer el oficio de informador.
Agustín Carstens, gobernador del Banco de México, deja acéfala la institución en un momento complejo para la economía nacional, por la presión inflacionaria y la incertidumbre cambiaria ante la compleja negociación del TLC. En el sector se siguen barajando varios nombres para sucederlo, pero todo indica que el proceso estará entrampado con las decisiones políticas en materia electoral.
Luis Videgaray, canciller y quizá el hombre con mayor influencia sobre el presidente Peña Nieto, tuvo que digerir un discreto coscorrón presidencial tras los elogios vertidos en la víspera en favor de su amigo personal por 30 años, el secretario de Hacienda, José Antonio Meade. La reacción de Los Pinos buscó evitar costos al equipo que hubiera supuesto el que Videgaray fuera el actor central del “destape” priista para la contienda del 2018.