Jorge Castañeda, quien se desempeñó como uno de los coordinadores de la campaña de Vicente Fox y luego asumió la cancillería durante una parte central de la presidencia del guanajuatense, podría ser el coordinador de la campaña de Ricardo Anaya, si antes no se atraviesa otro escándalo que cambie los planes de ambos.
Luis Videgaray debe haber recibido como viento fresco el reporte del diario The Washington Post que le atribuye conversaciones sobre la vulnerabilidad del yerno de Donald Trump, Jared Kushner, por su inexperiencia y propensión a hacer negocios personales. No faltaban los maledicentes que atribuían a Videgaray un sometimiento ante la Casa Blanca. Ahora surge como alguien capaz de manipular al despacho de poder más importante del mundo. Al parecer Trump está enfadado con nuestro canciller, pero aquí tendríamos que decir que esa es otra historia y que el señor está haciendo su chamba.
Miguel Ángel Mancera, el saliente jefe de gobierno de la capital del país, parece encaminado a tener una amarga despedida por agravios que acumulan diversos grupos. Hoy puede encarar protestas generalizadas de organizaciones vecinales si decide armar un acto público para la inauguración de la polémica Línea 7 del Metrobús, que se halla rodeada de múltiples impugnaciones.
Morelia
¿Quién dijo que los mexicanos somos flojos o baquetones? Datos del indicador de horas trabajadas de la OCDE 2018 muestran que los mexicanos destinan dos mil 255 horas al año a sus labores, lo que representa un promedio de 43 horas a la semana; la cifra es la más alta entre las 35 economías que integran este organismo internacional, la OCDE.
En contraste, los alemanes trabajan, en promedio, mil 333 horas al año. Las cifras de la OCDE revelan que no siempre se obtienen mejores resultados al dedicar más tiempo al trabajo.
Precisa que de sus países miembros, México registra los niveles más bajos de productividad laboral entre todas las clases de pequeñas y medianas empresas.
Respecto a los países de la OCDE con los que México tiene mayor comercio, Canadá es donde menos horas se trabaja al año, con mil 703 horas, mientras que en Estados Unidos cada trabajador destina, en promedio, mil 783 horas, que es ya muy cerca del promedio de la OCDE, de mil 773.
En América Latina, además de México, los países que más trabajan al año son Costa Rica, que está en segundo lugar con dos mil 212 horas, y Chile, en el quinto peldaño con mil 974 horas.
Entre las naciones que menos horas trabajan al año están, como le decía, Alemania, con mil 363 horas, que es 892 menos que los mexicanos, y Noruega, con un promedio de mil 424 horas.
De las economías europeas, Grecia es la que trabaja más horas, al registrar un total de dos mil 35 al año; Japón, país que acuñó el término karoshi para definir la muerte por exceso de trabajo, reportó mil 713 horas al año, cifra menor a las mil 783 de la OCDE y 542 menos que México.
Así que, digamos que así está el mapa mundial de los países en cuanto a las horas que trabajan y, sí, ciertamente un grave problema que tiene México, independientemente de la creación de empleos, que no necesariamente están bien remunerados, pues es la baja productividad. Es decir, muchos van a trabajar pero no todos trabajan.