El crecimiento económico de nuestro país se entiende como el incremento en la producción de bienes y servicios en la economía calculado a partir de estimar el valor de todo lo que se produjo en un año y compararlo con el valor de todo lo que se produjo durante el mismo periodo del año pasado. En días recientes se dieron a conocer los resultados del crecimiento de nuestra economía, obteniéndose el 0.1 por ciento en el segundo trimestre del presente año.
Al respecto, surgieron diversas opiniones relacionadas con el tema, para el Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas, este crecimiento no debe interpretarse como un resultado alentador, pues lo que refleja es una fase de estancamiento.
Consideramos que el tema relativo al crecimiento económico en México debe ser una de las prioridades más importantes de todos los gobiernos, en este caso, del correspondiente al Presidente López Obrador, toda vez que su importancia es tal, en términos generales, porque entre más sea el crecimiento en la economía de un país, mayores son las oportunidades de vida de la ciudadanía en todos los aspectos.
En este sentido, es indispensable que nuestro gobierno adopte estrategias que fortalezcan el crecimiento económico, pues el resultado alcanzado para el segundo trimestre es demasiado incipiente; en términos de lo señalado por el Fondo Monetario Internacional, cualquier estrategia para reactivar el crecimiento de la economía de manera sostenida, debe estar basado en recuperar la confianza de los inversionistas y reactivar ésta tanto en el sector público como en el privado. De ahí que para que el objetivo de crecimiento en 4 por ciento prometido por el gobierno en turno sea una realidad, debemos tener más inversión, necesariamente.