Una nueva reforma constitucional para un nuevo sistema educativo

El artículo 3 de la Constitución Federal establece que todas las personas tenemos derecho a recibir educación, así como que la Federación, Estados, Ciudad de México y Municipios impartirán y garantizarán la educación inicial, preescolar, primaria, secundaria, media superior y superior, correspondiéndoles a éstos la rectoría de la educación.

En mayo pasado en el Congreso de la Unión, por una parte, se canceló la reforma educativa implementada por la pasada administración que, a decir del presidente López Obrador “nunca debió aprobarse la mal llamada reforma educativa. Fue un error garrafal, una imposición” y, por otra parte, aprobamos una nueva reforma constitucional en la que se dan las bases para un nuevo sistema educativo que garantizará la educación pública, universal, inclusiva, obligatoria, laica, pluricultural, de calidad y gratuita, en todos los niveles escolares.

La semana pasada el pleno de la Cámara baja aprobó la Ley General de Educación, la Ley Reglamentaria sobre Mejora Continua de la Educación y la Ley General del Sistema de Carrera de las Maestras y Maestros, ahora nos corresponde a los Senadores de la República su discusión, primero en comisiones y luego en el Pleno.

Esta reforma educativa ha sido también cuestionada, existen sectores de la población que no están de acuerdo con la misma, sin embargo, cuando menos en el papel, este sistema educativo implementado por el presidente López Obrador tiene como finalidad que se garantice la educación en todos niveles y que las y los maestros tengan acceso a una plaza para desempeñar su labor como docentes.

Estoy segura de que las leyes reglamentarias que aprobemos sí abonarán a mejorar la educación, pues es la base del crecimiento de nuestro país en todos los aspectos.