La economía, el estrés, el clima y, por supuesto, nuestra salud, nos angustian. Respirar ha tomado un significado más importante.
Este es profundamente un invierno emocional en el que nuestro regalo mutuo es la salud. Necesitamos cuidar nuestro sistema y a la vez tomarnos “un respiro” por nuestra salud mental. Necesitamos oxígeno, con acciones positivas. Y a la vez necesitamos apoyar a quienes se encuentran enfermos.
Debido a la cantidad de personas contagiadas de Covid-19 en este semáforo rojo, conseguir un tanque de oxígeno se ha convertido, en algunos casos, en una odisea. Afortunadamente, hay muchos esfuerzos de las autoridades, de organizaciones de la sociedad civil y de la ciudadanía organizada para ayudar a las familias que están desesperadas por conseguir estos contenedores.
Por un lado, el Gobierno de la Ciudad de México, a través de la Secretaría de Salud, instaló estaciones de recarga gratuita de cilindros portátiles para quienes requieren de oxigenación artificial. En alcaldías como Iztapalapa y Xochimilco se pusieron en marcha programas para donar o prestar los tanques cargados a las personas que lo tengan prescrito.
Los esfuerzos son necesarios, pero podrían ser insuficientes sin el apoyo de la sociedad. Si tú ya pasaste por una situación de angustia de no encontrar un contenedor, y afortunadamente tu familiar ya se recuperó, devuélvelo o dónalo. Puedes ayudar a alguien que realmente lo necesite.
Para ello, la Procuraduría Federal del Consumidor inició una campaña llamada “Por amor a la vida”, con la cual se busca hacer conciencia en las personas. En el Consejo Ciudadano para la Seguridad y Justicia de la Ciudad de México nos unimos: pedimos a todas las personas que sean solidarias, ahora más que nunca.
Si logramos hacer circular todos los cilindros de oxígeno posibles incluso podemos prevenir los fraudes relacionados con la venta de estos artículos vitales. En este enero, en la Línea de Seguridad y Chat de Confianza de WhastApp 55 5533-5533 atendimos a 11 personas víctimas de este delito.
Así que, si está dentro de tus posibilidades ayudar, no lo dudes. Seguramente le darás más que un respiro a una familia angustiada. Y recuerda, si en esta pandemia necesitas, además, apoyo emocional o información sobre los servicios que están funcionando puedes llamarnos o mandarnos un mensaje de WhatsApp. Es un honor poder ayudarte a ti y a todas las personas en la contingencia.