Artistas como Steve Aoki se han encargado de repartir ese tipo de energía que el planeta entero necesita para sentirse acogido y protegido por un arte, de esa energía que te mueve, que te llena de vida, de ritmo, de esa que siempre es necesaria y siempre cae bien.
El DJ y productor americano, comparte la idea de adaptarse, reconstruirse y ser mejor y que mejor que hacerlo a través de algo tan etéreo como la música, en charla exclusiva nos dice: “es un momento de adaptación, tenemos que adaptarnos porque todos sabemos que la vida tiene que cambiar y por hay que reconfigurarnos. Y creo que fue bueno para algunos de nosotros, siempre hay algo bueno en las cosas que pasan. El mundo cambia, y creo que muchos de nosotros pusimos atención en más cosas y las convertimos en prácticas más grandes”.
Ahora a manera de himno Steve Aoki se une a Willy William, Sean Paul, El Alfa, Sfera Ebbasta y Play N Skillz para “Mambo”, una canción que no sólo es universal por su ritmo y sus sonidos, sino porque nos muestra diversidad en todo aspecto.
“Mambo es un baile mundial es acerca de reunir al mundo entero, yo hice música pensando en eso, porque es la música la que reúne a todos, sin importar el idioma o el género, o de donde vienes, cuando escuchas la canción te conectas con otras personas. Esta canción está en 3 idiomas, inglés, español e italiano, y esa es la esencia de la canción y me hace muy feliz el recibimiento de la gente”.
Y el vídeo es otra gran maravilla de la tecnología, pues este milagro del Siglo XXI hizo su magia para transmutar en un impecable vídeo, “es como arte, es llamativo, con colores brillantes y realmente abstracto. Las cabezas se abren para adentrarnos a todo, y pudimos grabarlo en lugares lejanos todo gracias a la tecnología”.
Mas no es un secreto que se extraña la sensación de un concierto en vivo, se extraña la adrenalina de comprar boletos y prepararse para el gran día, al respecto Aoki comenta: “extraño los festivales, los shows, extraño mezclar con gente, extraño la energía, los rostros, extraño todo. Pero ya sabes, regresaremos y lo haremos más fuertes que nunca”.
Y tal como lo menciona Steve, la esperanza es lo último que se pierde y no hay duda de que volveremos más fuertes que nunca porque la música ha demostrado que para unir almas y corazones, no existen barreras, ni tiempo límite.