La música está formada por cimientos que a menudo se alimentan de recuerdos. Y esos mismos son los que nos permiten disfrutar de la evolución de este arte como medicina para el alma.
Ana Torroja ha fijado su vida –y una larga trayectoria– en el objetivo de darle más valor a los sentimientos, al corazón y el alma con la mera existencia de sus canciones.
“La música es la mejor medicina porque además tiene efectos secundarios. Todos son positivos y realmente para mí también lo ha sido, ha sido compañera de pandemia y, dependiendo de lo que hacía, siempre había música constante. Hasta cuando me tocaba limpiar, había música”.
Y es que la española regresa a la escena con Hora y cuarto, un tema en el que no solamente comparte créditos con Alaska, sino que además esta canción se convierte en la entraña del pop de los años 80, pero con un sonido y un ritmo totalmente actuales.
La música que nos hace la vida está compuesta de cimientos que se alimentan de recuerdos. Y Hora y cuarto es una rica mezcla de ese pop que dio origen a lo que hoy conocemos y disfrutamos incluso en otros géneros.
“Traigo música nueva y una canción que para mí ha sido un regalo de la pandemia. Es que, en cuanto la escuché, me llegó la inspiración y supe que era la canción que estábamos esperando desde hace tantos años”.
Fruto de la inspiración, es como Torroja ha conseguido posicionarse como uno de los íconos más aclamados del pop en español, pues con sus canciones –e incluso con sus placeres– ha demostrado que la música es un arte que carece de fronteras.
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“Yo escucho de todo, puedo escuchar desde jazz hasta house cuando hago ejercicio. Me gusta mucho la música africana, me gusta mucho la música latina, así que depende del momento. Y cuando tenía ganas de saltar, bailar y todo, pues me ponía un reguetón. Y de eso se trata la música, de no limitarse, de no encerrarse en un género, porque ahora hay tantos que debemos disfrutarlos todos”.
Y la española dio en el punto clave de la historia de la música como arte universal del corazón, ya que hoy la cuestión de géneros se ha degenerado tanto que el arte mismo provoca que te veas inmerso en cada uno de ellos en un solo instante de tu vida.
A través de una canción, un ritmo, una letra o un álbum completo –como el que Ana Torroja lanzó el día de hoy– es como podemos entender más a detalle que la música siempre ha sido una vitamina para el alma.