Juan y la muerte, una fantasía purépecha sobre la pérdida

Juan es un niño angustiado por su madre enferma que logra engañar y encerrar a la muerte en un frasco, con lo que el inevitable deceso de su progenitora se pone en pausa, pero al mismo tiempo genera un desorden para su comunidad.

Dejan de morir las plantas, los animales y las personas, por lo que Juan deberá de tomar una decisión difícil: dejar las cosas como están y conservar a su madre, o liberar a la muerte y continuar con el curso de natural de las cosas. 

Esta es la idea central de Juan y la Muerte, una obra de teatro dirigida especialmente a los niños para abrir un diálogo con sus padres sobre la pérdida.

El dramaturgo y director César Chagolla explica en entrevista para Publimetro que para quienes resulta más fuerte la obra es para los adultos, mientras que los niños terminan con preguntas sobre la muerte.

«Es el objetivo y uno de los grandes logro que han tenido la obra, abrir el tema de conversación y que los niños puedan preguntar para que la pérdida no sea un tabú y regresar un poquito el carácter natural a la muerte», expresa Chagolla.

Un tema difícil 

César además de ser dramaturgo, estudió psicología, interesándose principalmente en la tanatología dirigida a los niños, «en algún momento de mi vida hice servicio social en el Hospital infantil de Morelia y me tocó convivir con niños con enfermedades terminales», cuenta.

«Ellos estaban intentando entender el proceso de duelo de su propia vida», dice sobre la motivación para escribir esta obra, «para contribuir un poco de manera directa a partir del arte».

Para Chagolla es importante esta aportación porque se habla muy poco de la muerte con los niños y no hay un plan educativo en las escuelas que los ayude a afrontarla como lo que es: un proceso natural e inevitable.

Y es que la mayoría de las obras infantiles que abordan el tema de la muerte lo hacen a través de metáforas, «no está mal en el teatro para niños, pero lo que pretende Juan y la Muerte es no suavizar demasiado el tema».

Una experiencia Purépecha 

La historia se desarrolla a las orillas del Lago de Pátzcuaro, Michoacán,  y en la puesta en escena se usan trajes típicos, danza, máscaras, todo basado en tradiciones y estética de la cultura Purépecha.

«Hay máscaras de madera características de la Danza de los Viejitos, vestimenta y arquitectura Purépecha; gran parte de la puesta en escena está recargada en el diseño sonoro y la musicalización, que es lo que nos termina trasladando al Lago de Pátzcuaro», explica Chagolla.

Cuándo y dónde 

Esta obra se estará presentado los sábado y domingo a las 13:00 horas en el Teatro Sergio Magaña en la colonia Santa María la Ribera hasta el próximo 15 de diciembre.

«Es importante que nos quitemos el miedo a hablar de estos temas, hay que tener en cuenta como padres que somos responsables de la educación emocional de nuestro hijos; evitar hablar de ello los afecta más cuando se tienen que enfrentar a la muerte. Invitó a los padres que lleven a los niños y puedan hablar con ellos de todas las inquietudes que surjan», invita el director.