La propuesta de este nuevo restaurante toma su inspiración en el andar del chef por diversas ciudades como Dubái, Doha, Abu Dhabi, Serbia e incluye grandes capitales gastronómicas como lo son Nueva York, Miami y Los Ángeles.
Su carta, compuesta por entradas frías y calientes, ceviches y tiraditos, sopas, ensaladas, tacos, plato fuerte a base de carnes y mariscos, es una invitación a dejarse seducir para probar de todo un poco y corroborar la ejecución de estos apetecibles platos.

Platillos como el ceviche de lenguado, el pulpo turco o la tártara de atún, en la que los aiolis hechos en casa a base de leche de soya, uno de ajo rostizado y otro de carbón activado, aportan a estos productos la nota cremosa sin quitarle su protagonismo.
Hay platos muy bien logrados como la costilla de res, ahumada y braseada por más de 8 horas, donde la suavidad y el sabor de la carne te harán exigir los mismos niveles de preparación a donde quiera que vuelvas a probar una costilla de este estilo.

El pescado a las brasas, con hierbas finas acompañado con puré de colinabo, que recibe el toque final en la mesa con un flameado de licor del 43, platillo único y sencillo, pero de gran resultado, es también otro de los platos imperdibles.
Resulta gratamente sorprendente el arroz con mariscos, pues se sirve en un sartén tipo paellera de tamaño pequeño, acompañado de generosas porciones de almeja blanca, camarón U12, chistosa, calamar, hortalizas, y callo de hacha de muy buen sabor y consistencia que en nada se parece a una paella o el típico arroz chino. Un plato muy destacado.

El chef dirige toda la experiencia degustativa y pone especial atención a la mixología con opciones como la versión 2.0 de la tradicional margarita, la Carmina Ashes, un cóctel elegante además de impactante al ojo y delicioso en sabor o en los postres como el pastel de chocolate versión Carmina donde no se escatima en el porcentaje de chocolate para entregar en mesa una verdadera joya de pastel o la banana al cubo que resultan adictivos.

Como parte de su decoración el restaurante resguarda en su interior un mural de realidad aumentada creado por la joven artista Bili Bala, quien ha participado en festivales de arte urbano en varias ciudades de Mexico y en países como Estados Unidos y Perú y en proyectos artísticos colaborando con marcas como Vans, Mexicráneos, El Rey León el musical, Clip, Corona Capital, entre otros.
Carmina es, sin duda, una propuesta que provoca el disfrute de los sentidos en un ambiente ideal, donde la creatividad, la libertad y la experiencia dan como resultado momentos para la memoria y que invita a compartir con los amigos.