La sabiduría popular dice que no hay nada nuevo bajo el sol y, quizás, en la cocina de mar se aplique muy bien este refrán porque ya cuenta con recetas base que los cocineros solamente van variando con diversos ingredientes o salsas para dar en el gusto.
Introducción
A pesar de que muchos restaurantes se ufanan de innovar o crear «nuevas recetas», lo cierto es que pocos son los que aciertan en casi todo su menú para abarcar al mayor número de comensales.
Tal es el caso de El corazón del mar, un restaurante ubicado en Georgia 52, en la Nápoles, que te dejará sorprendido por la preparación de sus platillos y el equilibrio que ofrece en sabor, presentación y precio.
Casual y sin ser pretencioso, resulta el lugar ideal para pasarla muy a gusto en compañía.
La atención siempre es clave en el servicio y su propietario, Arturo Moreno, quien durante muchos años estuvo a cargo de cadenas de restaurantes como director de operaciones.
Lo sabe bien y está atento a que todo marche en orden, platica con los comensales, hace sugerencias, explica la elaboración de sus platillos, pero sobre todo, disfruta viendo a la gente deleitarse con sus preparaciones.
La experiencia
Ver la carta provoca la emoción equiparable a la de un niño en una juguetería: hay tantas opciones y todas lucen tan apetitosas, que se antoja pedir una probadita de todo.
En esta ocasión nos dejamos llevar por las sugerencias de la chica que nos atiende, Karen, quien se sabe muy bien los platillos estrellas del lugar.
Como primer tiempo llegan cinco mini tostadas, un plato surtido de atún, camarón, ceviche de pescado, jaiba y pulpo al ajillo, todas de muy buen sabor y presentación.
Nos decidimos por esta opción porque pensamos que realmente eran pequeñas, pero las porciones son tan generosas que, a pesar de compartirla dos personas, aplacó muy bien el hambre.

Después llegan unos ostiones en su cocha, se trata de ocho piezas servidas con cebolla, cilantro y limón, bastante frescos, de buen tamaño y mejor sabor, además de un Fish taco estilo Ensenada.
Este último consiste en un filete capeado, acompañado de repollo y aderezos Mayochipotle y Serrano.
Estos platos se piden con el fin de comparar y, efectivamente, igualan en sabor a los que se encuentran en la península de Baja California.
Es un restaurante en el que van a encontrar lo mejor de los mundos de la cocina del mar: los sabores intensos de la marisquería tradicional; la conveniencia de las preparaciones fast food y una oferta gourmet que se puede encontrar en restaurantes de alta categoría, pero que te van a costar tres veces más.
Bebidas y platos fuertes
Los mariscos se disfrutan mejor con una cervecita fría y para esta ocasión, aunque hay de las comerciales conocidas, se elige del apartado de las artesanales una Humpy Humpy, tipo amber ale que marida bien con los sabores y aplaca al picante.
También hay coctelería y vinos por si se desea acompañar con algún plato en particular.
Se pide un aguachile, pero para probar todos los que están en el menú se solicita que traiga una porción de cada uno de ellos: verde de camarón, estilo mar negro, rojo estilo Pacífico y chilango de tamarindo…¡qué delicia!
Comiéndolos compruebo de que hay varios restaurantes que utilizan más el marketing para atraer clientes que el sabor de sus platillos.

Todos están deliciosos, pero el Mar Negro se lleva las palmas por la acertada combinación de ingredientes.
Son camarones cristal marinados en limón acompañados de pepino blanco, cebolla morada fileteada, cilantro, aguacate y jugo de aguachile con salsas negras, que le da un toque intenso y exquisito.
Con la plática y las bebidas se deja pasar un tiempo para espera a que el estómago no se sienta tan lleno y así pedir los platos fuertes: mojarra rellena de mariscos y camarones Mai Mai en salsa de tamarindo y chipotle.
La mojarra es casi medio kilo de alimento, una verdadera exageración.
El pescado se fríe y se rellena con una mezcla de mariscos, camarones y pulpos, jitomate, chile cuaresmeño y epazote, mientras que los camarones van salteados con tocino y bañados en salsa de tamarindo agridulces y picositos acompañados de bombones de queso Philadelphia.
Sin aliento y sin palabras nos quedamos con estos últimos platos, por lo bien servidos y el sabor tan delicioso que no habíamos encontrado en muchas de las marisquerías y restaurantes que hemos visitado por varios rincones de la CDMX.

El menú
En su carta debe de haber más de 250 preparaciones para satisfacer al más melindroso de sus clientes con sus diversos apartados de consomé, entradas, snacks, cocteles, ceviches, aguachiles, ostiones, tostadas, arroces y pastas.
Mojarra, filetes, atún, salmón, pulpo y camarones preparados con diversas recetas de especialidad y las tradicionales; para el antojo hay tacos, burritos, chimichangas y hamburguesas.
Hay un apartado llamado Delicias del Patrón en el que encontrarás platillos de “especialidad”, por llamarlo de algún modo, como el pozole de mariscos, paella o la torre de mariscos.
También incluye pulpo rostizado con la receta de la casa y algunos molcajetes como el de mariscos estilo Los Mochis, el de carnitas de atún y el mar y tierra, todos para dos personas.
Conclusiones
El lugar es un flechazo al corazón para los amantes de la buena preparación de mariscos por su cocina honesta, porque emplea ingredientes de calidad y porque la ejecución y presentación de los platillos denota pasión para entregar en la mesa un sabor extraordinario en cada uno de ellos.
A pesar de la enorme cantidad de opciones que se encuentra en su menú, se puede resumir en tres grandes apartados: platillos tradicionales, quienes todos conocemos muy bien por las marisquerías a las que acudimos regularmente o los puestos callejeros.
Fast food para aquellos que llevan prisa y disponen de poco tiempo, como lo son tacos, tostadas, chimichangas y burritos; y la cocina gourmet, en base a pulpos, salmones, pescados y atún para quienes prefieren algo más elaborado y acompañar con vino sus alimentos.
Si ya están cansados de andar de lugar en lugar buscando un restaurante que esté a la altura de sus expectativas, como quien esto escribe, vayan y conozcan El corazón del mar, estoy seguro que los atrapará por todo lo anteriormente enumerado y no sólo eso, sino que lo convertirán en su lugar favorito.