Nadia Navarro es Senadora del Partido Acción Nacional por el estado de Puebla, hija de maestros, de quienes afirma aprendió el valor del estudio y la importancia de la educación como pilar fundamental para el crecimiento social.
“Desde niña me indignaron la injusticia, la pobreza y la desigualdad, situación que me motivó a ser abogada”.

En entrevista con Pilar Preza, Nadia contó su papel dentro del ámbito de la política dentro del Senado de la República y como ha impulsado las políticas de igualdad y paridad de género.
“Nos hace falta mucho, la gran mayoría de feminicidios ocurren en Latinoamérica…tenemos que avanzar en temas de empoderamiento y representación femenina».
Mujer convencida de la importancia de la familia como pilar fundamenta para una estructura que determina la proyección en todos los ámbitos.
“En mi personal punto de vista, no concibo que un funcionario púbico no se prepare ni se forme para las labores que desempeñará. Por eso no dejo de leer y aprender, en particular del tema que más me ha importado y ocupado: la igualdad de género”.
Se ha desempeñado como presidenta de la Comisión Municipal de Derechos Humanos e Igualdad de Género del Ayuntamiento de Puebla durante el periodo 2014-2017 e impulso el programa Ciudades Seguras junto con la Organización de las Naciones Unidas, logrando que Puebla fuese el primer municipio del país en obtener tal reconocimiento.
También Nadia y su equipo lograron concluir la instalación del Sistema Estatal para la Igualdad entre Mujeres y Hombres, así como para la Prevención, Atención, Sanción y Erradicación de la Violencia Contra las Mujeres; desde el Senado ha puesto especial empeño en impulsar que las mujeres tengan la representación y justicia que merecen.
¿Cuál ha sido el mayor reto como legisladora?
La senadora aseguró que durante el próximo periodo electoral en 2021 las mujeres cuentan con las herramientas legales para acceder a los cargos públicos más importantes, en igualdad de circunstancias, además de asumir cargos a la altura, implementar acciones desde los distintos sectores para fortalecer las instituciones y garantizar políticas públicas que permitan a las mujeres seguir participando activamente en las decisiones del país.