Jesús Molina, el primer refuerzo del equipo de Rayados, realizó hoy los exámenes médicos para integrarse de lleno a la pretemporada con el resto del plantel.
El jugador salido de la cantera de los felinos, sabe que su llegada al cuadro del Cerro de la Silla no tiene contentos a todos los aficionados, sin embargo asegura que su pasado Tigre ya quedó atrás, pues ahora se debe a los colores azul y blanco.
«Hay gente que no está muy contenta por mi llegada (a Rayados), se puede entender, pero como lo fije en un momento cuando me fui de Tigres, que yo en mi niñez le fui al América, en realidad mi infancia fue americanista”.
«Como profesional que soy me entrego al equipo que me da la confianza, en este caso Rayados, voy a dar lo mejor por estos colores, al final mi carrera es lo que está en juego y yo voy a dar lo mejor de mi», dijo el mediocampista.
REGRESA A MONTERREY
Molina de 28 años, debutó con los felinos en 2007 y en 2010 salió de la institución para militar en equipos como América y recientemente Santos, y aunque se encuentra agradecido con los auriazules por darle la oportunidad de ser profesional, desea cosechar muchos éxitos con la Pandilla.
«Por Tigres siempre va haber agradecimiento por haberme debutado, el darme a conocer en el futbol mexicano, sólo eso, agradecimiento.
El nacido en Sonora, dijo que no dudó en venir a Rayados cuando se le hizo el ofrecimiento, pues sabe que en la ciudad se vive intensamente el futbol, algo que ya deseaba vivir y que experimentó con los Tigres.
«Es un reto muy importante en mi carrera, cuando supe del interés no dudé en venir, porque ya se como se vive el futbol acá (en Monterrey) ya necesitaba sentir eso que viví hace seis años, yo se que me va a ir muy bien», comentó.
