Una de las escenas más emotivas de los Juegos Olímpicos de Tokio se dio en el heptatlón femenil y fue protagonizada por la británica Katarina Johnson-Thompson.
La campeona mundial en 2019 se dispuso a correr la primera eliminatoria de los 200 metros pero a los pocos segundos del disparo de salida se detuvo y cayó en la pista de tartán lesionada, al parecer de la pantorrilla.
Las asistencias entraron de inmediato e incluso llevaron una silla de ruedas para auxiliarla, pero Johnson-Thompson la rechazó y se levantó para terminar la prueba cojeando.
Su esfuerzo generó que el resto de las corredoras la felicitaran al terminar la prueba y la reconocieran por su decisión. Pero lamentablemente la joven de 28 años no podrá seguir participando de los Juegos Olímpicos y resta saber cuál es la gravedad de la lesión.
La atleta oriunda de Liverpool había arrancado el día con un primer puesto en su serie de 100 metros con vallas y había terminado tercera de su grupo en salto en alto, aunque no había tenido una buena actuación en lanzamiento de peso. Por su lesión no podrá continuar compitiendo y por ende no participará del resto de las pruebas del heptatlón.
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