Microsoft presentó su nueva consola, la Xbox One X, con gráficos en ultra alta resolución (4k) y un procesador con sistema de refrigeración líquido que la convierten en «la más potente hecha nunca», según anunció el responsable de Xbox, Phil Spencer, en una conferencia previa a la feria E3.
Tras meses de especulación sobre el lanzamiento, que había adoptado el nombre de «Proyecto Scorpio», la Xbox One X, la más pequeña de la familia Xbox, se pondrá a la venta en todo el mundo el 7 de noviembre por 499 dólares y será compatible con todos los accesorios y juegos de Xbox One.
El hardware de la nueva consola de Microsoft le planta cara a su más reciente competidora, la PlayStation 4 Pro de Sony, con características punteras de procesamiento gráfico, como 6 teraflops y 12 GB de memoria RAM GDDR5.