El festival anual estadounidense ha probado una y otra vez, desde su nacimiento en 1986, ser una incubadora artística sin precedentes. Partiendo de la zona auditiva, la propuesta visual artística que nace desde visuales digitales hasta increíbles esculturas e instalaciones interactivas (obviamente incluyendo el hombre quemado), la peregrinación anual de unas 70 mil personas aproximadamente hacia el desierto de Nevada parece ser que nunca es en vano.
A continuación puedes degustar varias tomas de las instalaciones y esculturas más impresionantes que llegaron a Black Rock Desert. La producción, calidad artística y potencialidad anímica de cada una de ellas, en muchos casos, podría superar lo visto en cualquier bienal del mundo.
Deleita tus ojos con la selección 17 del 2017 en Creators Project
