Los hechos ocurrieron en la fiesta del Xiringüelu, en la región de Asturias en España, los jóvenes intimidaban a golpes a los camareros detrás de la barra, pues pedían más fiesta y alcohol.
Los esfuerzos de los trabajadores eran inútiles, ni podían disuadirlos, ni podían salir de ahí. Tras esos momentos de tensión, la Guardia Civil desalojó en cuestión de segundos el lugar.