En muchas ciudades del mundo el uso del automóvil es un común denominador para generar congestionamientos, construir grandes estacionamiento y producir contaminación; por tal motivo, algunas urbes ya buscan alternativas para brindar a sus ciudadanos alternativas seguras, sustentables y sencillas de transportes público.
Innisfil es una población de alrededor de 80 mil habitantes ubicada al norte de Toronto, Canadá, que vio en Uber la oportunidad de organizar su transporte público, reducir los costos de operación para el gobierno local y buscar un medio para movilizarse que dependiera de la demanda de la ciudadanía.
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“En junio de 2016, Uber era la única compañía con una aplicación que facilitara el compartir viajes y que estos coincidieran entre dos o más pasajeros en todo el país (por ejemplo, UberPool)”, explica el ayuntamiento de Innisfil.
El sistema funciona de forma muy sencilla a través de la aplicación de Uber. Los residentes son capaces a través de ella de solicitar viajes compartidos a lugares populares o a donde ellos quieran las 24 horas del día por medio de tres opciones:
- Destinos claves: Cuando los residentes piden un viaje para el centro de la ciudad, la estación de trenes, estaciones de bus en la avenida principal u otros lugares concurridos el precio será de 3 a 5 dólares canadienses.
- Destinos personalizados: Los ciudadanos pueden pedir un Uber a donde deseen sin las restricciones de la ciudad y con una tarifa especial para pobladores. La tarifa está determinada en el sitio oficial de la aplicación.
- Vehículos accesibles: Las personas que tengan alguna discapacidad pueden obtener un taxi especial cuyo costo será igual al de cualquier unidad Uber.
De acuerdo con datos ofrecidos por la ciudad de Innisfil, la inversión sólo ha sido de 225 mil dólares canadienses; sin embargo, no está destinado para la compra de unidades o estacionamiento para los vehículos. El ayuntamiento sólo brinda apoyo económico para subsidiar las tarifas de sus habitantes y así controlar los mismos precios siempre.
UberTransit
Para este tipo de recolección de datos sobre tráfico y demanda, Uber ha creado una nueva sección corporativa denominada UberTransit.
Este equipo de trabajo analiza el tiempo, eficiencia y congestionamiento que suceden en las ciudades donde opera Uber, de esta forma, tanto la empresa como gobiernos locales pueden trabajar para darle solución a los problemas de movilidad particulares de cada población.
David Reich, director de este equipo, explicó para Publimetro que el futuro de Uber no está únicamente en los automóviles sino en que se puedan mejorar las experiencias de las personas en el tráfico.
“Hay diferentes tipos de transporte para movilizar a las personas que se ajustan a las necesidades de tiempo, costo y lugar de ubicación estas son bicicletas, scooters, Uber X, UberPool “, ahondó.
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De esta forma, la compañía con sede en San Francisco busca analizar el comportamiento de sus vehículos y mejorar la red pública de transporte en las ciudades del mundo, así como promover el compartir los viajes entre usuarios y reducir el número de autos en las calles.
Según Reich esta estrategia apenas arrancó en Estados Unidos y Canadá pero se prevé que en futuros meses pueda ser aplicada en Latinoamérica donde los problemas de tráfico y seguridad traerán nuevos retos para la comunidad Uber.
Un dato:
Por cada pasajero de Uber hay 100 en el transporte público en Estados Unidos.
