El presidente Andrés Manuel López Obrador adelantó en la conferencia de prensa matutina que su gobierno pasará a una nueva etapa, es decir, de la “austeridad republicana” a la “pobreza franciscana”. Hecho por el que este jueves tendrá una reunión con el gabinete para dar a conocer las medidas de austeridad adicionales.
Cuestionado sobre en qué consiste la “pobreza franciscana”, AMLO respondió: “Vamos a reducir bastante, casi no va a haber viajes al extranjero, o sea, vamos a procurar que toda la comunicación se haga por teléfono o por teleconferencias, y vamos a reducir viáticos aún más, y otras medidas”.
Como ejemplos de la “austeridad republicana” que ha ejercido en su gobierno, López Obrador afirmó que no se han adquirido nuevos vehículos para los funcionarios, y que la camioneta que él tiene es modelo 2018, adquirida en el sexenio anterior. “Hay camionetas de las que usamos con 400 mil kilómetros y 10 años de uso. Les estamos dando mantenimiento y funcionan bien, no me han dejado tirado en las giras”, añadió.
Organismos autónomos también se someterán a la pobreza franciscana
El presiente pidió avanzar más en el plan de austeridad, “independientemente de lo que tiene que ver con poderes autónomos y que esto tiene que tratarse como una cuestión de Estado, es austeridad republicana de Estado”, todo con el objetivo de seguir manteniendo ahorros, seguir sin deuda y no solicitar deudas adicionales.
“La fórmula es sencilla, es cero corrupción y austeridad para liberar fondos al desarrollo, entregar recursos a la gente más necesitada”, comentó y añadió que se han ahorrado, hasta este momento, cerca de dos billones de pesos en general.
Pero, ¿Qué es la pobreza franciscana?
La pobreza es una de las principales características de la espiritualidad franciscana, inspirada en la vida de San Francisco de Asís y tuvo su origen el 24 de febrero de 1208, cuando San Francisco de Asís tomó la decisión de llevar una vida de pobreza, que con el tiempo causaría la fundación de las órdenes franciscanas.
“Según recuerda la Curia General de la Orden de Frailes Menores Capuchinos, San Francisco, durante una Misa en la hoy Basílica de Santa María de los Ángeles en Asís (Italia), escuchó las palabras del Evangelio sobre el envío de los apóstoles y las tomó como un mensaje enviado personalmente para él”, reseña el sitio especializado ACI Prensa.
El origen de la pobreza franciscana tiene su origen en el capítulo 10 del Evangelio de Mateo, en el que el Jesús envía a sus apóstoles y les instruye a no llevar “oro, ni plata, ni dinero en sus bolsas, ni alforja para el camino ni dos túnicas, ni sandalias, ni bastón”.
San Francisco de Asís comenzó “una vida de pobreza extrema, dedicada a los anuncios itinerantes del Evangelio, especialmente el llamado a la penitencia”, señala ACI Prensa. “Él vivió de lo que le ofrecían los habitantes de Asís, a los que comenzó a pedir yendo de puerta en puerta”, añade.
“Francisco era muy consciente de la dura realidad de la pobreza. Abrazó la pobreza no por idealismo. Francisco abrazó la pobreza porque Cristo lo hizo. Francisco reconoció que, al hacerse humano en la forma de Jesús, Dios “se hizo pobre por nosotros en este mundo” y, si iba a imitar a Jesucristo en todas las cosas, razonaba Francisco, tendría que imitar a Cristo en su pobreza”, añade el sitio Loyola Press.