El nuevo comisionado del Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (Inai), Rafael Luna Alviso, llega al cargo con historial negativo: en 2016 recibió una sanción administrativa por parte de la Contraloría General de la Ciudad de México.
Luna Alviso y Ana Yadira Alarcón fueron seleccionados, este miércoles, por el Senado de la República para ocupar los dos lugares vacíos del pleno del Inai. Sin embargo, hubo polémica en la votación porque el primero mencionado no figuraba en la lista de los 13 aspirantes finalistas y, a pesar de ello, la Junta de Coordinación Política (Jucopo) lo postuló para el cargo.
De acuerdo con el expediente CI/CUA/D/0062/2016, Rafael Luna fue acreedor de una amonestación privada –una corrección disciplinaria, la cual se identifica como una prevención especial, llamada de atención o advertencia– por no transparentar su declaración de conflicto de intereses cuando fungió como director general de Seguridad Pública de la alcaldía Cuauhtémoc.
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El ahora comisionado del Inai tomó este puesto el 1 de octubre de 2015, fecha en la que comenzó el mandato local de Ricardo Monreal, senador de Movimiento Regeneración Nacional (Morena) y actual presidente de la Jucopo.
La declaración de conflicto de interés –requisito obligatorio para todos los funcionarios de la Ciudad de México desde su primer día de trabajo– de Rafael Luna Alviso se omitió hasta el 14 de marzo de 2016, según el documento de la Contraloría General.
Cabe destacar que el nuevo integrante del pleno del Inai no detalla lo anterior –ni la sanción administrativa ni su trabajo en la alcaldía Cuauhtémoc– en el currículum vitae que presentó para ser uno de los candidatos entrevistados por el Senado, donde labora como coordinador de la Consultoría Jurídica Legislativa.
