Luis Rubio, presidente de México Evalúa, acaba de publicar su más reciente libro “¡En sus Marcas! México hacia 2024″, donde trata la relación entre el ciudadano con el contexto político nacional contemporáneo. Por ello, Publimetro contactó al escritor para establecer un diálogo sobre el texto y su perspectiva del momento de transición que se vive en la última recta del sexenio del presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO).
El autor señaló que el objeto del libro es plantear una ruta que explique por qué se llegó a la encrucijada política actual por la que pasa México. Para llegar a la respuesta, contrastó el rumbo que AMLO le ha dado a la república en lo que va de sexenio, pues mientras que los regímenes desde 1982, con la llegada de Miguel de la Madrid, apuntaban a la senda del globalismo y la liberación de mercados, con la Cuarta Transformación (4T), la apuesta es mirar hacia adentro de México.
“El presidente López Obrador ha cambiado esa línea. Entonces, la pregunta para el 2024 es si vamos a volver a pensar, en términos de un país incorporado al resto del mundo o un país que se aísla, que mira hacia adentro y que busca resolver sus problemas de una manera distinta”
¿El pueblo está polarizado o el pueblo está discutiendo?
El libro advierte diversos conceptos predefinidos que se han expresado a lo largo del sexenio; sin embargo, un punto de partida relacionado con la ciudadanía es el tema de la polarización. Por ello se le pidió que hiciera la diferencia entre “polaridad” y el “discusión”. Para ello, señaló los temas más importantes para la agenda de AMLO cuando llegó al poder en 2018: pobreza, desigualdad, corrupción y crecimiento económico.
En este sentido, manifestó que, al no cumplir sus propios objetivos, el presidente de la república ha optado por darle presencia a los resentimientos, a los que no habían sido incluidos en la discusión nacional, teniendo como consecuencia una sociedad polarizada.
“Yo creo que el hecho de incorporar esta discusión es fundamental, creo que es una mala estrategia que en vez de sumar, aliena; en vez de resolver, tiende a crear nuevas dificultades para poder avanzar”
El panorama económico y de seguridad en México
En materia económica, se le preguntó Rubio qué se necesita para promover el bienestar entre los ciudadanos, pues existen estados, como Guanajuato, donde el crecimiento económico y el crecimiento en la pobreza van de la mano, por lo que se preguntó su opinión en relación a esto y una mejor política distributiva.
Para que todo el mundo se beneficie, respondió, debe de haber una Reforma Fiscal, esto para garantizar una recaudación equitativa y para que la distribución del gasto público permita la entrada de todos los habitantes en materia de desarrollo. Asimismo, con miras al largo plazo, enfatizó el respaldo que debe de tener la educación pública.
A nivel seguridad, subrayó que se debe de promover un proyecto a largo plazo que vaya de abajo hacia arriba, es decir, que el esfuerzo de la federación sea para que en municipios y estados se restaure la paz y, posteriormente, que éstos tengan la capacidad de preservar la paz.
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En México, abundó, el Estado ha desaparecido de algunos lugares, por lo que las estructura de seguridad federal debe hacer presencia en los municipios en aras de, en primer lugar, establecer la paz, y, en segundo lugar, iniciar un proceso de fortalecimiento a las estructuras locales de seguridad. Ello bajo la finalidad de retirar a las fuerzas federales y, con el tiempo, dejar a las policías locales robustecidas para que se puedan hacer cargo de la seguridad municipal y estatal
Esto quiere decir que, de acuerdo con la lógica del autor, el Ejército puede ayudar a establecer la paz en México, pero no para mantenerla.
¿Qué es lo que sigue para 2024?
En ¡En sus Marcas! Luis Rubio trata el tema de un nuevo empoderamiento para la sociedad civil, por lo que en la entrevista se le cuestionó por la marcada tendencia que existe entre miembros de las élites empresariales por hacerse parar por “un ciudadano de a pie” y la confusión que esto puede provocar en las clases asalariadas que están incursionando en procesos de democratización.
Como respuesta, refirió que en una encuesta se sostiene que el 58% de los mexicanos se asumen como ciudadano y 42% como pueblo, e interpretó que el sector minoritario (el pueblo), “quiere que sus problemas se los resuelva el gobierno”; lo que tuvo como consecuencia que se abundara sobre este respecto, pues si bien, los apoyos sociales pueden ser utilizados como un método clientelar, se asume una voluntad de la población por ser sumiso ante quien le dote el recurso.
Sin embargo, reafirmó que los que deben de estar en pie de lucha para exigir sus derechos, son los ciudadanos de pie, pero reconoció que ese es uno de los grandes retos de México. Es decir, que el ciudadano que nutre la base de la pirámide debe de ir más allá del ejercicio del voto y manifestar sus exigencias ante el gobierno.
Finalmente, ante la probabilidad de que Morena gane las próximas eleciones presidenciales, Luis Rubio sostuvo que la sociedad se debe de organizar para saber a qué derechos tiene derecho, para que posteriormente idee la mejor metodología para exigirlos. En ese sentido, insistió en que los servicios de educación y de salud son fundamentales para que se pueda materializar esta posibilidad.