El reciente aseguramiento de aproximadamente 1.6 toneladas de cocaína frente a las costas de Guerrero fue resultado de un operativo estratégico de la Secretaría de Marina. De acuerdo con el capitán Erick Reyes, la operación forma parte de un esfuerzo constante por preservar el estado de derecho en el mar, mediante el despliegue y preposicionamiento de unidades especializadas.
“Todos estos operativos son parte de un esfuerzo permanente para el mantenimiento del estado de derecho en la mar”, explicó Reyes en entrevista para Publimetro. Detalló que la Armada emplea patrullas oceánicas, unidades de vigilancia aérea y tecnología avanzada para monitorear rutas marítimas que han sido previamente identificadas como comúnmente utilizadas por organizaciones criminales para el tráfico de droga.
Este trabajo de inteligencia permitió anticiparse al movimiento de una embarcación con cargamento ilícito, lo que derivó en su intercepción y en el aseguramiento de 1.6 toneladas de cocaína.
Resultados históricos de la estrategia nacional
Durante la presente administración, la Marina ha logrado asegurar más de 48 toneladas de cocaína, reflejo de un cambio importante en los procedimientos operativos y en la aplicación de los cuatro ejes de la estrategia nacional de seguridad. Reyes destacó que estos resultados no son casualidad, sino producto del análisis constante del comportamiento del crimen organizado.
“Cabe destacar que así como se analizan los procedimientos que emplean algunas organizaciones criminales que se dedican al trasiego de droga por mar, pues también la Armada de México adecua sus procedimientos”. Mencionó que el mar es un espacio demasiado amplio para una vigilancia tradicional, por lo que el uso de inteligencia y tecnología resulta crucial para anticipar y actuar con precisión.
Asimismo, mencionó que la colaboración con otras instituciones también ha sido clave: “Compartimos la información, generamos mesas de análisis conjuntas… llevamos durante la presente administración 48 (toneladas aseguradas), lo cual representa logros bastante considerables”.
Impacto económico y social del decomiso
El capitán Reyes explicó que el impacto del aseguramiento no sólo es operativo, sino también económico y social. Basados en tabulaciones oficiales nacionales e internacionales, se calcula que la droga incautada equivaldría a unas 3 mil 200 millones de dosis que no llegaron al mercado.
“Esas estimaciones se hacen con base a tabulaciones previstas por autoridades tanto internacionales como nacionales, como la fiscalía, y es con base en el peso de la carga”, explicó. Además, agregó que la afectación económica asciende a más de 371 mil millones de pesos mexicanos. “Evitamos que 3 mil 200 millones de dosis llegaran a los jóvenes y a las personas que se pueden ver afectadas por esta exposición”, recalcó.
Embarcaciones difíciles de detectar
Sobre los medios utilizados por los grupos delictivos, Reyes explicó que estos suelen recurrir a embarcaciones con cascos de gran calado, capaces de transportar más de dos toneladas por viaje. También emplean unidades conocidas como embarcaciones de bajo perfil o semisumergibles, que son construidas artesanalmente con fibra de vidrio y sobresalen apenas 30 centímetros del agua, lo que dificulta enormemente su localización.
Por otro lado, estas naves cuentan con entre tres y cuatro motores fuera de borda de 200 a 250 caballos de fuerza, lo que les permite alcanzar velocidades cercanas a los 75 km/h en altamar, dificultando aún más su intercepción.
Procedimiento legal tras el aseguramiento
Una vez que la droga llega a puerto, explicó el capitán, las autoridades competentes como la fiscalía realizan las pruebas para determinar su tipo y peso exactos. Luego, el cargamento se resguarda legalmente hasta completar las diligencias jurídicas correspondientes, para finalmente ser destruido en una incineración.
“La quema de la droga se realiza a cargo de la fiscalía en coordinación con las diferentes autoridades que la hayan asegurado”, concluyó.