El cambio climático dejó de ser una amenaza futura para convertirse en el detonante directo de la migración masiva. De ahí que, en las próximas dos décadas cerca de 213 millones de personas se verán obligadas a abandonar sus hogares dentro de sus propios países, esto debido a fenómenos extremos como huracanes, inundaciones y sequías, apunta el informe de LLYC.
Este dato no sólo anticipa una crisis humanitaria a nivel mundial, sino que da un giro histórico a la migración, donde el clima será la principal causa de desplazamientos en el siglo XXI, y no más la violencia, pobreza o los conflictos armados.
México ya es parte de este fenómeno, pues en los últimos 15 años nuestro país registró 2.7 millones de desplazamientos internos provocados por desastres naturales - según la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) - tal como el huracán Otis y Jhon, mismo que dejaron a miles de familias sin viviendas, empleo y sin condiciones para permanecer en los estados de Guerrero y Oaxaca.
En tanto, el informe advierte que de no existir políticas públicas preventivas y estrategias de adaptación territorial, estos desplazamientos se volverán permanentes, de ahí que ciudades saturadas recibirán a miles de personas sin una planeación urbana, mientras regiones completas podrían quedar despobladas.
¿Qué fenómenos han provocado más migración en México?
Entre el 2008 y 2023, se registraron un total de 185 desastres naturales, mismos que generaron un total de 2.7 millones de nuevos desplazamientos internos por desastres, siendo las inundaciones el 52% de las causas por los nuevos desplazamientos internos en México.
Además, las tormentas son responsables del desplazamiento de 4 de cada 10 mexicanos, y los terremotos únicamente el 8% de los motivos. Por otra parte, el año 2010 fue el periodo donde más desplazamientos se registraron debido a las inundaciones causadas por las lluvias torrenciales en Tabasco, Veracruz, Chiapas y Oaxaca.
Otro de los factores, que estarían detonando la migración climática - según la OIM - es la sequía y desertificación, pues en estados como Zacatecas - donde la agricultura y ganadería son el sustento de las familias - la falta de agua ha generado que los productores abandonen sus hogares como un mecanismo de supervivencia ante el fenómeno.
Asimismo, en estados como Yucatán y Chiapas, la sequía es visible, si bien aún no es tan catastrófica como al norte del país, debido a su vasto manto acuífero, está causando pérdidas económicas a través del bajo rendimiento de cultivos y cabezas de ganado.
¿Hacia dónde viajan los migrantes climáticos?
Debido a los cambios climáticos y sus estragos, la mayoría de los migrantes climáticos están abandonando sus lugares de origen - tal como áreas costeras y rurales - para ir hacia las zonas urbanas de México, que están principalmente en el centro del país.
Por ello, los especialistas estiman que las zonas metropolitanas como es la Ciudad de México, Guadalajara y Monterrey, en las próximas tres décadas recibirán el mayor número de migrantes a consecuencia del calentamiento global.
“La degradación ambiental y el cambio climático, podría resultar en la migración interna de entre 1.7 y 8 millones de personas hacia los centros urbanos en México para el año 2050”, advierte el informe de OIM.
Datos:
- En noviembre de 2024, las 51 familias de la comunidad de El Bosque, en Centla Tabasco, que perdieron sus casas debido al aumento del nivel del mar, fueron reubicadas en la ciudad de Frontera del mismo estado.
- En 2023, se registraron más de 193 mil nuevos desplazamientos provocados por desastres, de los cuales el 95% fue por tormentas tropicales y huracanes. La cifra de desplazamientos internos por desastres en 2023 fue 18 veces superior a la de 2022 en gran medida por las consecuencias que tuvo el impacto del huracán Otis sobre las poblaciones de la costa de Guerrero.
- El cambio climático está redefiniendo la movilidad en la región, por lo que entre 44 y 216 millones de personas podrían desplazarse dentro de su propio país en las próximas dos décadas, según estimaciones del Banco Mundial.
- La situación climática moverá los mapas urbanos, los precios de suelo y las propiedades de inversión en infraestructura.