MADRID, 2 (EUROPA PRESS)
La vicepresidenta segunda del Gobierno de España y ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz, ha advertido de que quien «haga fracasar» la reforma laboral tendrá que «explicárselo a los trabajadores» ya que se trata de una norma a la que es «muy difícil» decir que «no».
Así lo ha aseverado Díaz en una entrevista con el diario ‘El País’, recogida por Europa Press, en la que ha insistido en que la reforma, que tiene el objetivo de «atajar la temporalidad» y «corregir la precariedad», es «difícil de tumbar».
«Quien la haga fracasar tendrá que explicarle a los trabajadores de Cádiz o los que están sin negociar su convenio porque acabó la ultractividad que prefiere la norma anterior. O tendrá que decirles a las camareras de piso o a los trabajadores de seguridad privada de empresas multiservicio que van a seguir cobrando el salario mínimo, (…) o a un precario que en lugar de tener un contrato estable va a seguir con un contrato de dos días», ha avisado.
En este sentido, ha pedido a los partidos que valoren «bien» lo que supone la nueva norma y se ha referido directamente al líder del Partido Popular, Pablo Casado, para lamentar que haya mostrado su negativa a la medida. «Además de un enorme error, me parece que daña a España», ha criticado, para añadir que la oposición es un «páramo».
Díaz ha enfatizado en la importancia del acuerdo con la patronal y los sindicatos, un acuerdo que ha «priorizado» pese a que le hubiera gustado hacer otras cosas y en el que el mayor obstáculo ha sido la temporalidad, ya que marca un modelo en el que habrá un «cambio de tendencia brutal» en este aspecto, donde «los contratos van a ser estables y se va a presumir de indefinidos».
«Para mí hubiera sido más fácil hacerlo unilateralmente, pero quería que este acuerdo saliera con el acuerdo de los agentes sociales», ha añadido al respecto, para incidir en que en los nueve meses de debate la mesa de negociación ha presentado una «enorme sensibilidad». Incluso, ha indicado, se ha «alterado en dos o tres ocasiones» por «cuestiones ajenas» al Ministerio de Trabajo.
Por otro lado, ha relatado que la Comisión Europea ha estado «muy encima» de la negociación y ha participado en conversaciones «intensas» en más de 70 reuniones, pero «en ningún momento» ha puesto «ningún obstáculo» a la norma.
Díaz ha expresado también sus «agradecimientos absolutos» al Gobierno por su colaboración en la reforma laboral y ha destacado el papel «determinante» de la ministra de Hacienda y Función Pública, María Jesús Montero.
En la misma línea, ha apuntado que esta norma «no era sencilla» para el actual Ejecutivo, en el, ha reconocido, «hay muchas voces» y «muchas formas de pensar».
La ministra ha señalado también que en el diálogo se ha asegurado de que cumplía con sus «acuerdos» y, por ello, no se ha debatido sobre el despido, ya que pese a que Unidas Podemos intentó incorporarlo en el acuerdo de Gobierno con el PSOE, este no lo aceptó. No obstante, ha defendido que la reforma ha «elevado la protección por despido» y está hecha para «evitarlos».