MADRID, 2 (EUROPA PRESS)
El primer ministro portugués y secretario general del Partido Socialista (PS), António Costa, ha defendido la necesidad de una victoria clara de su partido en las elecciones del próximo 30 de enero para tener «gobierno estable para los próximos cuatro años» y evitar así «sobresaltos políticos», una referencia a la necesidad que ha tenido el PS desde 2015 de lograr el apoyo de partidos de izquierda para aprobar los presupuestos públicos.
Precisamente estos comicios del 30 de enero se han convocado anticipadamente debido a la negativa del Partido Comunista de Portugal (PCP) y el Bloque de Izquierda a apoyar los presupuestos del gobierno del PS en minoría.
«A final de mes vamos a decidir qué gobierno queremos para Portugal. Necesitamos un gobierno estable para los próximos cuatro años, para no andar de crisis en crisis ni volver a tener sobresaltos políticos tan dramáticos como este que estamos viviendo en la lucha contra la pandemia», ha afirmado Costa en un vídeo difundido en redes sociales.
Además, Costa ha destacado que «hay vida más allá de esta pandemia» y ha apostado por que «es el momento de pasar página», la misma expresión utilizada por el presidente Marcelo Rebelo de Sousa en su mensaje de Año Nuevo. Rebelo de Sousa ha abogado por «pasar página» igual que en su momento se «pasó página» de la austeridad.
«Tenemos que concentrarnos en la recuperación y en el progreso. No podemos desperdiciar la oportunidad», ha remachado Costa, que se ha propuesto como objetivo lograr la mayoría absoluta.
El principal rival de Costa en las elecciones será Rui Rio, del conservador Partido Social Demócrata (PSD). Además concurren con opciones la formación ultraderechista Basta, PSP, Bloque de Izquierda y Los Verdes.
En plena campaña, el Gobierno ha aprobado subir a 705 euros el salario mínimo desde el 1 de enero, lo que beneficiará a unos 880.000 trabajadores, según destacó el sábado el propio Costa en otro mensaje publicado en Twitter. Supone un aumento de 40 euros, un récord histórico en el país.
Desde que llegó al poder hace seis años, Costa ha impulsado un incremento del salario mínimo del 40 por ciento y se ha propuesto llegar hasta los 750 euros en 2023.