BERLÍN/VIENA, 1 (DPA/EP)
El Gobierno austriaco y responsables del Partido Socialdemócrata alemán, núcleo de la coalición de Gobierno en Alemania, han rechazado una propuesta de la Comisión Europea para declarar como «inversión verde» ciertos proyectos nucleares y de gas hasta el punto de que plantearían una denuncia si el borrador sigue adelante.
La propuesta plantea dar la calificación de «verde» a los proyectos que sustituyan al carbón y emitan hasta 270 gramos de CO2 por kw/h, según el borrador, al que ha tenido acceso la agencia de noticias Bloomberg. Con esta calificación se podrían obtener licencias de construcción hasta 2030, siempre que exista un plan para cambiar a energía renovable o de bajas emisiones antes de finales de 2035.
«Como estos planes se pongan en marcha tal y como están redactados, vamos a denunciarlos», ha avisado la ministra austriaca para Acción Climática, Leonore Gewessler, en su cuenta de Twitter.
Los partidarios de la medida creen que las plantas de gas con más limpias que las de carbón y que la energía nuclear no emite gases de efecto invernadero, pero los críticos de la propuesta entienden que las emisiones no son lo suficientemente inocuas como para ser calificadas como tal.
Gewessler ha acusado a la Comisión Europea de hacer un «lavado de cara» y asegurado que «la energía nuclear es peligrosa y en modo alguno representa una solución en la lucha contra la crisis climática».
También el líder adjunto de los Socialdemócratas en el Parlamento alemán, Matthias Miersch, ha declarado que «Alemania debería agotar todas las posibilidades a la hora de evitar la promoción de esta tecnología a nivel europeo» porque «la energía nuclear es insostenible y no tiene sentido, desde un punto de vista económico», dado el coste del almacenamiento de residuos y de la incapacidad para financiar nuevas plantas sin «enormes subsidios de por medio».
«El futuro solo debe pertenecer a las energías renovables, especialmente a nivel europeo», ha declarado Miersch, cuyo partido está en coalición con los Verdes y los liberaldemócratas, a DPA. «Si añadimos estos posibles subsidios a la energía nuclear, el resultado sería una distorsión enorme de la competitividad», ha asegurado.
Los Estados miembro y la Plataforma sobre Finanzas Sostenibles tienen hasta el 12 de enero para responder a la propuesta. Entonces la Comisión preparará una ley delegada que será enviada a los países y al Parlamento Europeo para su debate.