MOSCÚ (AP) — Rusia registró el jueves un fuerte incremento en el número de casos de coronavirus en medio de las advertencias de las autoridades ante una posible una nueva ola de contagios impulsada por la variante ómicron, más contagiosa que las anteriores.
La agencia estatal para el coronavirus reportó 21.155 nuevos casos el jueves, un 18% más que los confirmados en la víspera y un 33% más que los del lunes. Además, se registraron 740 decesos.
El nuevo repunte de las infecciones se produce tras un descenso constante en las infecciones en las últimas semanas, luego de una ola previa que batió récords.
La variante ómicron se propaga más rápido que su predecesoras, y ya es la dominante en muchos países. Además, infecta con más facilidad a las personas vacunadas o que ya pasaron el COVID-19 con otra cepa. Sin embargo, los primeros estudios apuntan a que es hay menos probabilidades de que cause cuadros graves de la enfermedad que la anterior, la delta.
El presidente de Rusia, Vladimir Putin, dijo el miércoles que la situación del virus en el país es “muy difícil” e instó al gobierno a prepararse. La viceprimera ministra, Tatyana Golikova, prometió presentar nuevas medidas de respuesta a finales de semana, pero no ofreció más detalles.
Anna Popova, directora de la agencia de salud pública rusa, Rospotrebnadzor, estimó el martes que el país podría registrar cifras de contagios diarios de hasta seis cifras.
Desde el inicio de la pandemia, Moscú ha reportado más de 10,7 millones de infecciones confirmadas y 319.172 fallecidos, de acuerdo con la agencia para el coronavirus. Pero la oficina estatal de estadística, que utiliza un criterio más amplio, eleva a más de 625.000 los decesos ligados al COVID-19 registrados entre abril de 2020 y octubre de 2021.