WARNER ROBINS, Georgia, EE.UU. (AP) — Un policía de Georgia fue suspendido y podría ser despedido por haber hecho ciertos comentarios en las redes sociales luego de que un juez sentenció a tres hombres blancos a cadena perpetua por asesinar al afroestadounidense Ahmaud Arbery, reportaron medios noticiosos.
En reacción a una nota publicada en la página de Facebook del canal WGXA-TV después de que los hombres fueron condenados por matar a tiros a Arbery, un hombre de raza negra que corría por un vecindario, alguien escribió: “Sin embargo, ese criminal arbery aun así recibió la pena de muerte”.
El comentario fue borrado posteriormente, pero las capturas de pantalla con el texto fueron compartidas a medios de noticias y a la jefatura de policía del condado Houston, que investigó y subsecuentemente suspendió al policía Paul Urhahn.
Una carta del jefe policial Cullen Talton, publicada en la página de Facebook de su departamento, precisó que se tomó la medida debido a una conducta que desacreditó al departamento y que era impropia de un agente, reportó WGXA.
El despido de Urhahn será efectivo el 20 de enero, a menos que él presente una apelación, informó la carta.
El subjefe Billy Rape dijo que Urhahn ya ha sido sancionado por otras infracciones, pero que este despido se basó solamente en “la destrucción del respeto público a sí mismo y a nuestro departamento a través de toda la indignación de las redes sociales”.
Urhahn no pudo ser contactado de momento en busca de comentarios el jueves. Parecía que su página en Facebook había sido eliminada y no hay un número telefónico registrado a su nombre.
Después de ver a Arbery corriendo en su vecindario cerca de Brunswick el 23 de febrero de 2020, Greg y Travis McMichael tomaron armas de fuego y subieron a una camioneta pickup para perseguirlo. El vecino de los McMichael, William “Roddie” Bryan, se sumó a la persecución en su propia camioneta y grabó el video con su celular, en el que aparece Travis McMichael realizando disparos de escopeta a corta distancia contra Arbery, de 25 años.
Los tres recibieron sentencias de cadena perpetua el viernes, y el juez negó cualquier posibilidad de libertad bajo palabra para los McMichael, que son padre e hijo.
