CIUDAD DE MÉXICO (AP) — Las autoridades mexicanas suspiraron de alivio el viernes cuando expertos determinaron que la muerte de varios cerdos en un matadero municipal en diciembre se debió a salmonelosis y pasteurelosis, una infección relativamente común, y no a peste porcina africana.
La Secretaría de Agricultura indicó en un comunicado que 220 cerdos fueron sacrificados como medida de precaución. Se encontraban en un rastro del estado de Nayarit, con litoral en el Pacífico.
El personal técnico también detectó en el lugar la bacteria Mycoplasma hyopneumoniae, que causa una enfermedad pulmonar a los cerdos.
Los animales comenzaron a morir en días próximos a la Navidad y fueron enterrados en una fosa para evitar que contaminaran la cadena alimenticia.
Se determinó que los cerdos no tenían gripe porcina, que a veces puede contagiar a humanos, ni peste porcina africana. Esta última puede causar grandes pérdidas y obligar a sacrificar piaras enteras. Ha sido detectada en China y partes de Europa.