SEVILLA, España (AP) — El partido de la Copa del Rey que fue suspendido tras el lanzamiento de un tubo desde las gradas se reanudó el domingo a puertas cerradas y sin el jugador del Sevilla que fue golpeado en la cabeza, en lo que el club calificó de “acto violento”.
Joan Jordán, volante del Sevilla, se encontraba en buen estado pero no pudo jugar en la derrota 2-1 ante el Real Betis. El partido se reanudó a los 40 minutos y con el marcador igualado 1-1. El Betis se clasificó a los cuartos de final gracias a la victoria como local.
Jordán fue trasladado a un hospital tras ser impactado por un tubo de PVC lanzado desde las gradas cuando el Betis celebra el gol de Nabil Fekir para el empate en el clásico andaluz en el estadio Benito Villamarín.
Jordán fue sometido a una serie de pruebas y se le diagnosticó “traumatismo craneoencefálico». Tendrá que estar en observación domiciliaria hasta que pase un periodo mínimo de 24 horas, según informó la federación española de fútbol.
La federación quiso evitar mayores problemas logísticas y mantuvo el partido en el Villamarín, pero sin permitir la presencia de público.
El Sevilla quiso que el partido fuera pospuesto para otra fecha con el fin de poder de contar con Jordán, pero el comité de competición de la federación desestimó el pedido.
Sergio Canales anotó el gol de la victoria para el Betis al culminar un contragolpe a los 73 minutos.
El partido culminó sin incidentes o altercados entre los rivales.
Según la prensa española, la persona que lanzó el proyectil desde las gradas fue detenida por la policía.
“El Sevilla condena el acto violento que ha sufrido hoy Joan Jordán, un hecho inaceptable en el mundo del deporte cometido por un individuo que, por supuesto, ni mucho menos representa a la afición del Real Betis ni a la forma de vivir el fútbol en nuestra ciudad”, dijo el Sevilla. “Asimismo, el club exige el mayor de los respetos para la figura de Joan Jordán, un profesional íntegro y una persona ejemplar que ha sufrido un ataque infame”.
Los jugadores del Betis deploraron el incidentes, pero algunos acusaron al técnico del Sevilla Julen Lopetegui de instar a Jordán a que se tirara al césped tras ser golpeado.
“Bochornoso e injustificable la acción de alguien que no representa a nuestra afición”, dijo el suplente del Betis Víctor Camarasa en Twitter. «Espero que Joan Jordan esté bien, aunque todos hemos escuchado (incluido el cuarto árbitro) como su entrenador le incitaba a ‘marearse y tirarse al suelo’».
El derbi sevillano es famoso por la rivalidad más intensa en España.
En 2007, el técnico del Sevilla Juande Ramos quedó inconsciente al ser golpeado en la cabeza por una botella lanzada por un aficionado del Betis.