MADRID, 18 (EUROPA PRESS)
Naciones Unidas advierte del deterioro de la situación humanitaria y de la seguridad en el sureste de Birmania, particularmente en los estados de Kayah y Kayin, tras la reciente escalada en los combates en las últimas semanas.
El portavoz de la Secretaría General de la ONU, Stephane Dujarric, ha pedido «acceso humanitario seguro y sin obstáculos» a los trabajadores de Naciones Unidas que se encuentran realizando labores humanitarias en la zona.
«Si bien los socios locales continúan brindando asistencia crítica para salvar vidas donde sea posible, varios socios humanitarios tuvieron que suspender las operaciones en diciembre debido a la inseguridad», ha dicho Dujarric en rueda de prensa.
Según la Oficina de Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA), actualmente hay cerca de 320.000 personas desplazadas por los enfrentamientos y la inseguridad desde febrero de 2021.
«La situación humanitaria y de seguridad en Birmania sigue siendo volátil, y los civiles son los más afectados por los enfrentamientos armados en curso (…) En los estados de Kayin y Kayah, así como en las regiones de Magway y Sagaing, los enfrentamientos se han intensificado, lo que ha provocado un aumento de las bajas civiles, la destrucción de propiedades civiles y el desplazamiento interno y transfronterizo», ha resaltado OCHA en un comunicado.
En concreto, desde la toma militar de febrero, más de 2.200 casas y otras propiedades civiles han sido incendiadas o destruidas, mientras que en el sureste del país se registró el mayor desplazamiento interno, con 175.700 desplazados internos desde febrero, seguido por la parte noroeste, con 132.200 desplazados internos, desde mayo del año pasado, según los datos de la organización.
La OCHA resalta que, pese a que la respuesta humanitaria llegó a principios de diciembre a más de 2,4 los tres millones de personas necesitadas identificadas en el Plan de Respuesta Humanitaria de 2021, las necesidades humanitarias «continúan creciendo».
«Un pequeño número de socios pudo llegar a los desplazados internos y otras personas afectadas en áreas de conflicto durante diciembre, pero un mayor acceso sigue siendo crítico para la entrega urgente de asistencia humanitaria a cientos de miles de personas vulnerables», han resaltado en su último informe.
Los humanitarios estiman que para 2022 cerca de 14,4 millones de personas tendrán necesidades humanitarias y han estimado un cálculo de 6,2 millones en «asistencia urgente». Para satisfacer estas necesidades, se requerirán 826 millones de dólares (unos 724,5 millones de euros).