Biden afirma que «considera» volver a designar a los rebeldes como una organización terrorista
El enviado especial de EEUU viaja a «capitales del Golfo y Londres» para «reimpulsar los esfuerzos de paz»
MADRID, 20 (EUROPA PRESS)
Las autoridades de Emiratos Árabes Unidos (EAU) han asegurado que los huthis usaron misiles balísticos y de crucero, además de drones, durante su ataque del lunes contra la capital, Abú Dhabi, que se saldó con al menos tres muertos y seis heridos.
El embajador de EAU en Estados Unidos, Yusef al Otaiba, ha indicado que los huthis emplearon «una combinación de misiles de crucero, misiles balísticos y drones contra ubicaciones civiles» en la ciudad y ha añadido que «muchos fueron interceptados, pero unos pocos no lo fueron».
«Tres civiles inocentes perdieron la vida, desafortunadamente», ha dicho durante un acto organizado por el Jewish Institute for National Security of America, en unas declaraciones que suponen el primer reconocimiento del uso de misiles por parte de los rebeldes yemeníes en el ataque contra la capital emiratí.
Así, Al Otaiba ha subrayado que los huthis son «una organización terrorista» que ha llevado a cabo un ataque contra un país que «no está en guerra». «Hemos dejado hace mucho la guerra en Yemen», ha argüido, a pesar del papel de EAU en el seno de la coalición internacional que encabeza Arabia Saudí.
El portavoz de las fuerzas militares huthis advirtió la semana pasada al Gobierno emiratí de «consecuencias» después de que las fuerzas progubernamentales respaldadas por EAU arrebataran a los rebeldes la provincia de Shabua (centro).
Sin embargo, Al Otaiba ha desvinculado al país del conflicto en Yemen y ha lamentado que «aún sea un objetivo», según ha recogido la cadena de televisión Al Arabiya. Por último, ha pedido a Estados Unidos que vuelva a designar a los huthis como una organización terrorista.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, revocó esta designación en 2021 y anunció el fin del apoyo de Washington a las operaciones de la coalición, si bien el mandatario afirmó el miércoles que está «considerando» la posibilidad de volver a incluir al grupo en la lista.
Tras ser preguntado sobre esta posibilidad, Biden se ha limitado a decir que «está siendo considerando». «Para un fin de la guerra en Yemen es necesario que las dos partes estén implicadas, y va a ser muy difícil», ha valorado, según la transcripción de sus declaraciones facilitadas por la Casa Blanca.
En respuesta, la Embajada emiratí en Washington ha aplaudido las palabras de Biden. «El caso está claro. Lanzan misiles balísticos y de crucero contra objetivos civiles, mantienen una agresión y desvían ayuda (humanitaria) al pueblo yemení», ha reseñado a través de un mensaje en su cuenta en la red social Twitter.
En este contexto, Washington ha indicado que el enviado especial estadounidense para Yemen, Tim Lenderking, ha iniciado un viaje a «capitales del Golfo y Londres» para «reimpulsar los esfuerzos de paz en coordinación con Naciones Unidas, altos cargos de los gobiernos regionales y otros socios internacionales».
«El enviado especial y su equipo presionarán a las partes para que reduzcan sus operaciones militares y aprovechen el nuevo año para participar totalmente en un proceso de paz inclusivo liderado por la ONU», ha manifestado el Departamento de Estado a través de un comunicado publicado en su página web.
Asimismo, ha hecho hincapié en que Lenderking «se centrará también en la urgente necesidad de mitigar las duras crisis humanitaria y económica a las que hacen frente los yemeníes». «Es imperativo que los donantes, especialmente los donantes regionales, den financiación adicional y que todas las partes en conflicto den pasos para mejorar el acceso y hacer frente a la crisis de combustible en Yemen», ha añadido.
De esta forma, el Departamento de estado ha recordado que el secretario general adjunto de la ONU para Asuntos Humanitarios, Martin Griffiths, afirmó la semana pasada ante el Consejo de Seguridad que 16 millones de personas necesitan ayuda por valor de 3.900 millones de dólares (alrededor de 3.432 millones de euros).
La guerra en Yemen enfrenta al Gobierno reconocido internacionalmente, encabezado por el presidente, Abdo Rabbu Mansur Hadi, y apoyado por la citada coalición internacional liderada por Riad, y a los huthis, respaldados por Irán.
El conflicto ha sufrido un recrudecimiento en varios frentes durante los últimos meses –principalmente en las provincias de Shabua y Marib– pese a los esfuerzos internacionales de mediación, en una guerra que ha provocado la que es la mayor crisis humanitaria mundial.