QUITO (AP) — El excontralor nacional y el exgerente de la empresa estatal Petroecuador fueron llamados el lunes a juicio acusados por presuntos actos de delincuencia organizada, junto a otras once personas entre empresarios y funcionarios públicos.
El juez de la Corte Nacional, Felipe Córdova, adoptó tal decisión acogiendo los indicios y pruebas presentados por la Fiscalía, que identificó a Pablo Celi, excontralor y a Pablo Flores, exgerente de Petroecuador, como líderes de una estructura integrada por 13 personas para cometer actos de corrupción.
Los miembros de esta presunta red delincuencial exigían 4,3 millones de dólares, una parte de los cuales fueron entregados, a una empresa privada prestadora de servicios petrolíferos, para lograr que la estatal Petroecuador le pague una deuda de 20 millones de dólares. Esta estructura operó entre 2017 y 2020, según las investigaciones.
El delito de delincuencia organizada tiene una pena de siete a 10 años de prisión para los autores directos, y de cinco a siete años para los colaboradores, además de otros elementos que pueda disponer el juez como la reparación de los perjuicios económicos.
Celi fue detenido en abril del año pasado como parte de esta estructura, donde también estaba el asesor del entonces presidente Lenín Moreno (2017-2021), José Augusto, pero este último se suicidó mientras estaba en prisión en mayo de ese año.