CALAMA, Chile (AP) — Con planteles diezmados por el coronavirus, lesiones y suspensiones, Chile y Argentina se enfrentarán el jueves en un escenario inédito en la reanudación de las eliminatorias sudamericanas para el Mundial de Qatar 2022.
El partido se disputará en la ciudad minera de Calama, en medio del desierto del norte de Chile, y a 2.260 metros de altura.
Los estrategas chilenos consideran que jugar en altura ayudará a aclimatar a los jugadores para el siguiente compromiso de la Roja: el choque con Bolivia en los 3.600 metros de La Paz.
Los próximos dos encuentros podrían marcar el rumbo definitivo para Chile, que marcha sexto en la tabla de posiciones con 16 puntos, apenas uno detrás de Colombia y Perú, equipos que se cruzarán el viernes en el feudo de los primeros. Una sucesión de tropiezos podrían malograr el empeño chileno de disputar su primer Mundial desde 2014.
Los cuatro primeros de Sudamérica avanzan directamente a Qatar y el quinto jugará un repechaje intercontinental.
Para Argentina, en cambio, sus últimos cuatro partidos de las eliminatorias se prestan para ponerse a tono rumbo de Qatar, donde el torneo arrancará el 21 de noviembre. El equipo de Lionel Scaloni aseguró la clasificación con una cosecha de 29 puntos y marcha en la segunda plaza, por detrás del líder Brasil (35 unidades).
Las ausencias parecen afectar más a Chile, empezando por el suspendido mediocampista Arturo Vidal. Tampoco estarán los defensores Mauricio Isla y Francisco Sierralta y el extremo Jean Meneses, todos afectados por COVID-19.
La buena noticia para su técnico uruguayo Martín Lasarte parece ser la notable recuperación de su delantero Alexis Sánchez por lo visto en sus últimas actuaciones con el Inter de Milán, puntero de la Serie A de Italia.
Argentina prescindirá de Lionel Messi, pese a que el astro se recuperó de un contagio de COVID-19 durante sus vacaciones de fin de año.
Messi no fue convocado por Scaloni como una especia de gentileza hacia el Paris Saint-Germain, el club francés del siete veces ganador del Balón de Oro. Se espera que su reemplazante sea Paulo Dybala, el jugador de la Juventus a quien siempre le costó estar a la sombra de Messi. Las otras opciones son Alejandro Gómez y Nicolás González.
Otras ausentes en Argentina serán el volante Guido Rodríguez por un caso de COVID-19 y el zaguero Cristian Romero, quien tuvo una lesión muscular severa ante Brasil en noviembre y recién volvió a jugar hace pocos días en el Tottenham inglés. El reemplazante natural de Romero es Germán Pezzella, pero está suspendido. Todo indica que Lisandro Martínez acompañará a Nicolás Otamendi en la zaga central.
“Va a ser un partido bravo. Ya lo vivimos en las eliminatorias y en la Copa América, fueron los dos resultados 1-1, partidos muy trabados», advirtió el arquero argentino Emiliano Martínez. «En esta oportunidad va a ser en la altura, no sabemos cómo va a ser. Es un equipo duro pero si damos lo mejor de nosotros tenemos chances de ganar el partido”.
Pese a la tranquilidad de la clasificación, “seguimos con hambre, no es que vengamos relajados”, agregó el portero del Aston Villa de Inglaterra.
Su colega chileno Claudio Bravo dijo que “Argentina viene haciendo las cosas bien. Pero esto dependerá de lo que hagamos nosotros».