MADRID, 30 (EUROPA PRESS)
Estados Unidos ha felicitado a las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS), las milicias kurdo-árabes que controlan el noreste de Siria, por recuperar el control de la prisión de Al Sina, en el barrio de Ghueiran de Hasaka, tomada al asalto por milicianos de Estado Islámico. El asalto se ha saldado con al menos 332 muertes, según fuentes no oficiales.
«Estados Unidos felicita a las Fuerzas Democráticas Sirias que, junto con las fuerzas de la Coalición han retomado el control de la prisión de Hasaka», ha afirmado el asesor de Seguridad Nacional estadounidense, Jake Sullivan, en un comunicado de la Casa Blanca. La Coalición ha colaborado con bombardeos y con carros de combate Bradley.
Sullivan ha destacado que gracias a la «valentía y determinación» de las FDS, «Estado Islámico no pudo lograr una fuga a gran escala para reconstruir sus filas», ha señalado.
El responsable estadounidense ha denunciado la «barbarie» de los actos de los milicianos yihadistas que «confirman los motivos por los que hay que evitar que se regenere este grupo y por qué los países deben colaborar para afrontar la cuestión de los miles de detenidos de Estado Islámico internos en centros de detención inadecuados».
«Estados Unidos sigue apoyando a nuestros socios en Irak y el noreste de Siria y la Coalición contra el Estado Islámico para contrarrestar la amenaza que supone el Estado Islámico para nuestras patrias», ha remachado.
Según el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos son al menos 332 los fallecidos tras una semana de combates en lo que se ha considerado como uno de los mayores asaltos de Estado Islámico desde su derrota territorial en el país.
Las fuerzas de seguridad kurdas, encabezadas por las Fuerzas Democráticas Sirias o FDS anunciaron el miércoles la toma del control de la prisión de manos de Estado Islámico, que el 20 de enero lanzó un asalto con las instalaciones para intentar liberar a miles de reos.
El asalto contra la prisión ha sido visto como una muestra del fortalecimiento del grupo yihadista, que durante los últimos meses ha incrementado sus ataques en partes de Irak y Siria.
Además, ha traído a la memoria la estrategia inicial de Estado Islámico con la operación ‘Rompiendo los Muros’ entre 2012 y 2013, que permitió liberar a muchos de sus líderes a través de una serie de fugas que reforzaron sus filas y permitieron una ofensiva relámpago en 2014 en Irak que posteriormente se expandió a Siria para conformar su ‘califato’, finalmente derrotado en marzo de 2019.