CIUDAD DE MÉXICO (AP) — México disputó el domingo sin aficionados el partido ante Costa Rica por las eliminatorias mundialistas de la CONCACAF, pero el presidente de la Federación Mexicana de Fútbol, Yon de Luisa dijo que espera que hasta 40.000 puedan asistir a los partidos ante Estados Unidos y El Salvador.
Ante los ticos, el Tri permitió el acceso a unas 2.000 personas al estadio Azteca para poner a prueba un programa de identificación de aficionados con el que esperan ponerle fin al grito homofóbico contra los porteros que les ha causado casi veinte castigos de parte de la FIFA.
México ya advirtió a sus seguidores que el que sea identificado por lanzar el grito será vetado cinco años de sus partidos.
“En la fecha FIFA de marzo veremos más aforo contra Estados Unidos y El Salvador, aunque con mayor aforo seguramente las complicaciones serán mayores”, dijo el dirigente antes de arrancar el partido. “Vamos a esperar cómo se dan estos partidos contra Costa Rica y Panamá, pero pensaríamos entre 30 y 40 mil (aficionados)”.
El Tri recibirá en el Azteca a los estadounidenses el 24 de marzo y el 30 del mismo mes hará lo propio ante El Salvador, en la última fecha del octagonal rumbo a Qatar 2022.
Para ingresar al estadio para esos partidos, los aficionados deberán comprar su boleto y registrar sus datos personales para recibir un código QR que será revisado al ingreso y deberá coincidir con una identificación oficial.
De Luisa dijo que en el futuro, la FIFA debería tomar en cuenta los esfuerzos que han hecho y que se debería penalizar a los individuos que lanzan los gritos y no a las federaciones.
“En caso de que alguien incurra en un acto discriminatorio se le investigue a esa persona, ni a la selección, ni a los jugadores que son los menos culpables, ni al cuerpo técnico”, dijo De Luisa. “Creo que de las federaciones del mundo, somos la que más trabajamos con las autoridades locales y con la propia FIFA, que nos felicita por las iniciativas, pero al mismo tiempo nos castiga”.
El ultimo castigo de la FIFA — el 17mo en la historia — incluyó jugar a puerta cerrada los encuentros ante Costa Rica y Panamá, pero México apeló ante el Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS), que dejó sin validez la sanción mientras toma una determinación.
Los dirigentes locales aprovecharon para experimentar con el nuevo programa con unas 2.000 personas entre familiares y trabajadores de la Federación Mexicana.
Esos espectadores gritaron México en los despejes de Keylor Navas, que es la palabra propuesta por los federativos en lugar de la homofóbica.