MADRID, 2 (EUROPA PRESS)
La Real Sociedad recibe este jueves (20.00 horas) al Real Betis en un partido correspondiente a los cuartos de final de la Copa del Rey, un duelo al que ambos conjuntos llegan en dinámicas positivas similares, tras haber eliminado a candidatos de nivel para el título -Atlético de Madrid y Sevilla, respectivamente- y con el deseo de avanzar a las semifinales para mantener su sueño ‘copero’ intacto.
El equipo de Imanol Alguacil eliminó (2-0) en los octavos de final a un Atlético de Madrid en horas bajas al que los vascos consiguieron neutralizar con un excelso partido de fútbol directo y máxima efectividad. Januzaj y Sorloth brillaron gracias al trabajo de Oyarzabal y Merino, en una actuación coral de un a plantilla que completó uno de los mejores encuentros de los ‘txuri-urdin’ esta temporada.
El técnico insistió en la previa del encuentro en que este partido es muy importante para las aspiraciones de la Real Sociedad esta temporada, ya que se encuentran ante la posibilidad de repetir en unas semifinales de Copa, las segundas en los últimos tres años. Y para alcanzar este objetivo, Alguacil volvió a invocar al empuje y el ambiente del Reale Arena, que se antoja clave en la eliminatoria.
El de Orio ha recuperado a prácticamente todos sus futbolistas, después de unos 10 días desde su último partido, el empate (0-0) ante el Getafe, que completa una serie de cinco encuentros consecutivos sin perder, con solo tres goles en contra. Así, Aihen y Zubimendi, únicas dudas para el jueves, están disponibles, por lo que el equipo vasco solo tendrá las bajas de los lesionados de larga duración Monreal y Carlos Martínez.
Por ello, el equipo titular será el más reconocible, con Remiro en la portería, Zaldúa y Aihen en los laterales y los fijos Elustondo y Le Normand en el centro de la defensa. Zubimendi podría ser el encargado de acompañar a Merino desde el inicio, con Januzaj y Oyarzabal en los costados, Silva de enganche y arriba el sueco Isak, que tras reaparecer contra el Getafe después de su lesión, estaría listo para ser de la partida.
Por su parte, el Betis llega a esta eliminatoria en uno de sus mejores momentos de la temporada. Los verdiblancos se deshicieron del Sevilla (2-1) en octavos, en el polémico derbi del lanzamiento del palo sobre Joan Jordán que obligó a aplazar el partido, en cuya reanudación los de Pellegrini se impusieron con solvencia y solidez, aupados por la calidad de sus dos buques insignia, Sergio Canales y Nabil Fekir.
También fue clave el binomio William Carvalho-Guido Rodríguez, pero el argentino no podrá estar en el Reale Arena, ya que se encuentra disputando las eliminatorias sudamericanas de clasificación para el Mundial, al igual que el también internacional blanquiazul German Pezzela y los mexicanos Andrés Guardado y Diego Lainez. Tampoco han entrado en la convocatoria el lesionado Claudio Bravo y Paul Akoukou.
Así, el técnico chileno podrá alinear a su once de gala, dando entrada a Edgar en defensa, Rodri o Joaquín en el centro del campo por la ausencia de Guido y con Carvalho como único pivote, y con Juanmi y Borja Iglesias como referencia en el ataque sevillano.
El Betis ha alcanzado, con Pellegrini a la cabeza, un nivel óptimo de fútbol y confianza que le ha permitido codearse con los equipos de la zona alta de LaLiga Santande. Ahora, el cuadro andaluz es tercero en la tabla con 40 puntos, seis más que la Real Sociedad, que se sitúa en sexto lugar.
Un gran momento de juego que se está viendo reflejado en los resultados. Los béticos ha logrado cuatro triunfos en sus últimos cinco partidos y como visitantes encadenan tres encuentros consecutivos sin perder. Una estadística que comparte con la Real Sociedad, que enlaza tres partidos sin perder en el Reale Arena, por lo que se antoja un duelo muy igualado por una plaza en semifinales.
En el último precedente entre ambos clubes en Copa, el Betis se llevó la eliminatoria por el valor doble de los goles fuera de casa gracias al empate en la vuelta (2-2), así como también venció en el encuentro de la primera vuelta de la Liga en el Benito Villamarín con un claro 4-0.