El jefe del Estado Mayor del Ejército francés apoya «la autonomización de los ejércitos de África occidental»
MADRID, 8 (EUROPA PRESS)
El jefe del Estado Mayor del Ejército de Francia, Thierry Burkhard, ha realizado su primera visita oficial a Costa de Marfil, donde ha visitado una academia antiterrorista abierta en el norte del país y ha ensalzado la necesidad de mantener una estrecha cooperación para combatir el yihadismo.
Burkhard ha manifestado a través de su cuenta en la red social Twitter tras su visita a la Academia Internacional de Lucha contra el Terrorismo (AILCT) en Jacqueville que se trata de «un proyecto innovador basado en una asociación franco-marfileña sólida».
Así, ha defendido que este proyecto «pone la cooperación internacional en el centro de la lucha contra el terrorismo», al tiempo que ha incidido en que se trata de «un proyecto ejemplar para la autonomización de los ejércitos de África occidental».
Asimismo, se ha reunido con su homólogo marfileño, Lassina Doumbia, y con el ministro de Defensa del país africano, Téné Birahima Ouattara, tras lo que ha destacado una «convergencia en los puntos de vista sobre la situación de seguridad en la subregión y en las modalidades de refuerzo de nuestra cooperación militar».
Por su parte, el director de la AILCT, Kouamé Allah, ha dado las gracias a París por su apoyo en la lucha contra el terrorismo y ha destacado el trabajo conjunto para poner en marcha la academia, tal y como ha recogido el diario marfileño ‘Fraternité Matin’.
Doumbia reconoció en noviembre de 2021 que el aumento de la inseguridad en el norte del país tras los últimos ataques por parte de grupos yihadistas es motivo de «preocupación», si bien aseguró que la situación está bajo control.
Costa de Marfil ha sido escenario de varios ataques durante los últimos meses, la mayoría de ellos en las cercanías de la frontera con Burkina Faso, en el norte del país, lo que ha llevado a ambos países a lanzar operaciones en la zona.
Los grupos yihadistas, principalmente las filiales de Al Qaeda y Estado Islámico en el Sahel, han multiplicado sus acciones en los últimos años en Malí, Burkina Faso y el oeste de Níger, y los gobiernos de la región temen que puedan seguir extendiendo su actividad hacia los países costeros de África Occidental.
Costa de Marfil ya fue escenario de un atentado terrorista en marzo de 2016, en la ciudad costera de Grand Bassam en el que murieron al menos 16 personas. El ataque fue reivindicado por Al Qaeda en el Magreb Islámico (AQMI).